Crónica Hong Kong.- Hong Kong celebra sus primeras elecciones a jefe ejecutivo con alternativa de voto desde 1997

Actualizado: sábado, 24 marzo 2007 16:07

La candidatura sorpresa de Alan Leong supone el primer indicio de voluntad democrática para el temor del Gobierno central de Beijing

MADRID, 24 Mar. (EUROPA PRESS) -

Las elecciones de mañana en Hong Kong para el cargo de jefe ejecutivo de la región supondrán que por primera vez exista una alternativa de voto entre dos candidatos desde que Reino Unido devolviera el territorio a China en 1997. Aunque muy pocos dudan de que el actual líder hongkonés, Donald Tsang, repetirá victoria en estos comicios, donde solo tienen derecho a votar los 800 componentes del comité electoral, los prodemócratas esperan que la oposición representada por Alan Leong sea el primer paso hacia una cultura de democracia total.

Tsang, que cuenta con el respaldo de la mayoría del comité, fiel al Gobierno chino y poco predispuesto, por tanto, para la instauración de un sistema democrático, se ha visto obligado a prometer el sufragio universal ante la inesperada presión de Leong, un abogado que en los últimos meses ha atraído la atención de la prensa tras conseguir 'colarse' en las elecciones al conseguir los 100 votos necesarios para presentar su candidatura.

Las condiciones por las cuales el Reino Unido realizó la entrega en el 97 se resumen en la llamada Ley Básica, cuyo artículo 45 estipula que el objetivo final es conseguir el sufragio universal en el país. El "cómo" y el "cuándo" son motivo de polémica.

"Todos queremos conseguir el sufragio universal lo antes posible, pero no lo voy a hacer porque alguien me provoque para hacerlo", afirmó Tsang en referencia a los críticos, principalmente procedentes de Taiwán, que califican el sistema electoral de Hong Kong como de elitista y ventajoso para Beijing. Y dadas las circunstancias económicas, políticas y sociales que confluyen en Hong Kong, muchos no terminan de entender como este territorio no cuenta ya con un sistema democrático completamente instaurado.

"UN PAÍS, DOS SISTEMAS"

Hace casi ya diez años, cuando Hong Kong regresó a manos chinas, las autoridades prometieron un amplio grado de autonomía bajo la fórmula bautizada en su momento por el fallecido presidente chino, Deng Xiaoping, como "un país, dos sistemas". En parte, se puede decir que han cumplido: los hongkoneses pueden criticar abiertamente a sus líderes y tienen el derecho a manifestarse en público, algo que no existe en el resto de China.

Para Hong Kong, la posibilidad de disfrutar del sufragio universal supondría la máxima expresión de sus libertades democráticas, por lo que los críticos entienden que Beijing debería escuchar la voz de las mayoría de los hongkoneses e "implmentar la democracia total" antes del año 2012, tal y como afirmó el pasado jueves el Consejo para Asuntos sobre Hong Kong y Macao, con sede en Taipei (Taiwán), en las conclusiones extraídas tras la reunión.

Gran parte del Gobierno taiwanés está a favor de la aprobación del sufragio universal en Hong Kong, partidario como es de cualquier tipo de reforma que amplíe las libertades democrácticas en territorios gestionados o bajo la influencia china. Sus recientes roces diplomáticos con Beijing han convertido a Taiwán en uno de los mayores defensores del proceso democrático en la península.

El director del consejo, Tsai Jy Jon, declaró que "la selección para el jefe ejecutivo de Hong Kong tiene forma de competición", pero aclaró que "sigue siendo una selección dentro de un pequeño círculo", comparando el sistema democrático del territorio con "una jaula para pájaros".

"De hecho, la sociedad de Hong Kong es estable, su economía es próspea y su sistema legal, sofisticado", explicó. "Es un país completamente cualificado para instaurar una democracia total, pero China, simplemente, se niega a aceptar las condiciones de Hong Kong", afirmó.

Según Tsai, China está preocupada de que el sufragio universal pueda incrementar la autonomía de Hong Kong y reducir la influencia continental. El director entiende que cerca del 70 por ciento de los hongkoneses se encuentran a favor de este nuevo sistema, a lo que hay que sumar el enorme "share" de audiencia "sin precedentes" que registraron los debates televisados entre Tsang y Leong, algo que muestra "la resolución del pueblo de Hong Kong para perseguir la democracia a pesar de la represión ejercida por China", según concluyó el director, en declaraciones recogidas por el diario 'Taipei Times'.

MANIFESTACIONES DE PROTESTA

El derecho de manifestación se vio el pasado domingo, cuando 1.800 personas pertenecientes a grupos prodemocráticos se congregaron en las calles de Hong Kong para protestar por la celebración de las elecciones.

Con gritos de "un hombre, un voto", los manifestantes iniciaron la marcha en el parque Victoria, para terminar exigiendo, delante de la sede de Gobierno, el sufragio universal en las elecciones. Encabezando la manifestación, el legislador prodemócrata Lee Cheuk Yan defendió que la lucha continuará "hasta que consigamos la victoria, recorriendo el camino a la democracia".

Y si el sufragio universal parece, a corto plazo, un logro inaccesible, la mayoría de los encuestados en un sondeo de la Universidad China de Hong Kong por lo menos desean ver a más candidatos luchando por el puesto de jefe ejecutivo: un 66,3 por ciento de los hongkoneses preguntados creen que la participación de Leong tendrá un efecto positivo sobre el desarrollo de la democracia en el territorio.

El primero que es consciente de ello es el propio Leong, que esta semana declaró al semanario 'HK Magazine' que su única intención es fortalecer la democracia en el país y que el triunfo final, para él, es lo de menos.

"No tengo la más remota posibilidad de ganar, pero no estoy aquí por el trabajo", reconoció el candidato. "Estoy para establecer una cultura electoral, y creo que los hongkoneses estarán de acuerdo en que el panorama político ha cambiado desde el primer debate", afirmó.

EL MÁS BRILLANTE PERO EL MENOS VOTADO

En una encuesta a pie de calle organizada por la Universidad de China tras el primer debate televisado organizado entre ambos contendientes, los consultados que juzgaron a Leong como el candidato más brillante fueron mayoría; sin embargo, la balanza se tornó a la hora de decidir por cuál de los dos votarían.

Entre la población hongkonesa, y especialmente entre las élites políticas y económicas, existe cierto temor a que Beijing termine irritada ante el exceso de demandas democráticas y tome represalias. Sin embargo, son muchos de estos empresarios los que se muestran molestos ante el papel de consorte que le depara a la ex colonia, ya que a nadie se le escapa la pretensión del Gobierno central de convertir a Shanghai en la capital económica del continente asiático, robándole el puesto a Hong Kong.

Sobre quién es el aspirante perfecto para ocupar el puesto de jefe ejecutivo de la isla todos parecen estar divididos. Hasta las mejores familias, aunque no resulte una gran sorpresa. En su ánimo indagador la prensa ha preguntado al magnate hongkonés Li Ka-shing, el hombre más rico de toda Asia, por quién votaría, a lo que éste no ha respondido pero ha señalado que lo haría por una persona que "ame Hong Kong y a la madre patria", uno de los términos más frecuentes en la fraseología oficial china.

En cambio su hijo, Richard Li (con quien los enfrentamientos, incluso empresariales, son de dominio público), ha expresado sin ambages su apoyo al sufragio universal en 2012. "Si no hay peleas entre padre e hijo, entonces es que hay algo va mal con el hijo", ha argumentado, con filosofía poco confuciana, Li Ka-shing.