Crónica Irak.- La Fiscalía iraquí pide la pena de muerte para Sadam Husein por la matanza de 148 chiíes en 1982

Actualizado: lunes, 19 junio 2006 21:00

Un grupo relacionado con Al Qaeda se responsabiliza del secuestro de dos soldados de EEUU y cuatro diplomáticos rusos

BAGDAD, 19 Jun. (EP/AP) -

La Fiscalía pidió hoy la pena de muerte para el ex presidente iraquí, Sadam Husein, y para dos de los otros siete acusados en el juicio por la matanza de 148 chiíes en Dujail en 1982, concretamente, su medio hermano Barzan Ibrahim y el vicepresidente de su régimen, Taha Yassin Ramadan. También hoy, el Consejo de la Shura de los Muyaidines, un grupo iraquí próximo a Al Qaeda, reivindicó en internet el secuestro de dos soldados estadounidenses y de cuatro empleados de la Embajada rusa en Irak, así como el asesinato de un quinto.

El juicio contra Sadam Husein, iniciado en octubre, es el primero celebrado contra el ex dictador iraquí tras la caída de su régimen en abril de 2003. La acusación y la Fiscalía presentaron hoy sus conclusiones y la defensa hará lo mismo a partir del 10 de julio. Cuando se hayan presentado los argumentos de las dos partes, el equipo de cinco jueces deberá interrumpir el proceso para considerar su veredicto.

Vestido con una chaqueta negra, Sadam Husein asistió en silencio, y en ocasiones tomando notas, a la lectura de las conclusiones del fiscal Al Moussaui, en las que expuso las pruebas contra cada uno de los ocho procesados.

Al término de su disertación, el fiscal, Jaafar al Moussaui pidió la pena de muerte contra Sadam Husein, Barzan Ibrahim --director de la agencia de inteligencia Mujabarat durante los hechos de Dujail-- y Taha Yassin Ramadan.

"La Fiscalía pide las penas más duras contra ellos, porque propagaron la corrupción en la Tierra, no mostraron ninguna compasión hacia los ancianos, las mujeres o los niños, y ni siquiera los árboles estuvieron a salvo de su opresión", proclamó. "La ley establece la pena de muerte y es esto lo que pedimos", añadió. "Bien hecho", respondió Sadam Husein con sarcasmo.

Al Moussaui pidió penas menos duras para otros tres de los procesados --Abdullah Kazim Ruwayyid, su hijo Mizhar Ruwayyid y Ali Dayih--, por considerar que cometieron los hechos "siguiendo órdenes de sus superiores", y la absolución de Mohamed Azaui Ali, para quien aseguró que no hay pruebas inculpatorias.

El fiscal no pidió ninguna sentencia concreta para Awad al Bandar, ex presidente del Tribunal Supremo Revolucionario de Sadam Husein, instancia que condenó a muerte a los 148 chiíes de Dujail. Según Al Moussaui, las actos de Al Bandar "apoyaron los crímenes" cometidos por el resto y pidió que se le condene "de acuerdo con las leyes del Tribunal", que incluyen tanto la pena de muerte como la cárcel.

Sadam Husein y los otros dirigentes están acusados de crímenes contra la Humanidad por la detención de cientos de personas --incluidos niños y mujeres--, por torturas en algunos casos mortales y por la ejecución de 148 personas chiíes condenadas muerte por un presunto intento de asesinato contra Sadam Husein en 1982 en esta localidad de Dujail.

HUSEIN SE EXTRALIMITÓ

En sus conclusiones, Al Moussaui expresó sus dudas de que hubiera habido realmente un intento de asesinar a Sadam Husein, lo que motivó la sentencia de muerte para los 148 chiíes, pero advirtió de que aún en el caso de que fuera cierto el régimen se extralimitó en la investigación de los hechos. "La operación militar que siguió al intento de asesinato fue un intento de venganza en el que se hizo un uso excesivo de la fuerza en respuesta a un simple incidente", afirmó.

La defensa ha argumentado que la represión en Dujail fue una respuesta legítima al intento de asesinato de Sadam Husein, que atribuye a rebeldes chiíes apoyados por Irán. Irak e Irán estaban entonces en guerra.

Según Al Moussaui, Sadam Husein, Ibrahim y Ramadan ordenaron "un ataque sistemático y a gran escala" contra Dujail. "Fueron encarceladas familias enteras, incluidos ancianos, mujeres y niños", afirmó. "Fueron trasladados a los cuarteles de Mujabarat en Bagdad, y sufrieron torturas físicas y mentales, incluidas descargas eléctricas", prosiguió.

A causa de las torturas y de las malas condiciones de vida en las cárceles murieron 46 personas, según el fiscal. Posteriormente, el Tribunal Supremo Revolucionario condenó a muerte a 148 de los detenidos, tras "un corto juicio en el que los acusados no comparecieron y no tuvieron oportunidad de defenderse", aseguró. Entre los 148 condenados había algunos niños, añadió Al Moussaui.

El fiscal mostró una cinta de vídeo sobre una sesión del pasado mes de diciembre del juicio en la que Sadam Husein afirmaba ante el Tribunal que era el único responsable de los hechos de Dujail. En aquella sesión, el ex presidente insistió en que no había hecho nada malo en su respuesta al supuesto intento de asesinato. "¿Dónde está el crimen?", preguntó Sadam Husein ante la sala en aquel momento.

CONTINÚAN LOS SECUESTROS

Por otra parte, también hoy un grupo insurgente iraquí vinculado a Al Qaeda, el Consejo de la Shura de los Muyahidines, y que abarca a varias organizaciones armadas (entre ellas la célula del fallecido representante de la red terrorista en Irak, el jordano Abu Musab al Zarqaui), reivindicó hoy en internet el secuestro de dos soldados estadounidenses y de cuatro empleados de la Embajada rusa en Irak, así como el asesinato de un quinto.

"Vuestros hermanos del brazo armado del Consejo de la Shura de los Muyahidines han secuestrado a los dos soldados americanos cerca de Yussifiya", afirmó el grupo en un comunicado colgado en una página islamista. "Los hechos vuelven a confirmar la debilidad de la supuesta Inteligencia americana, que anda perdida en Irak", prosigue.

"El Ejército de Estados Unidos ha lanzado una campaña de allanamientos utilizando vehículos blindados y equipos en la región (donde ocurrió) el incidente, pero el Ejército de 'la nación más poderosa del mundo' se retiró derrotado y en el oprobio", apostilla el comunicado.

Las autoridades estadounidenses afirmaron que están tratando de confirmar si los dos militares han sido efectivamente secuestrados. Se trata de Thomas Lowell Tucker, de 25 años, y de Kristian Menchaca, de 23, desaparecidos el pasado viernes durante un ataque insurgente contra un puesto de control en un distrito suní próximo a Yussifiya, a unos 30 kilómetros al suroeste de Bagdad. En el ataque murió un tercer militar norteamericano, David J. Babineau, de 25 años.

En un segundo comunicado divulgado unos minutos después, el mismo grupo se atribuyó el secuestro de cuatro empleados de la Embajada de Rusia y el asesinato de otro en Bagdad, el pasado 3 de junio. Por el momento, no se ha podido verificar la autenticidad de ambos comunicados.

"Dios ha permitido a los leones del monoteísmo detener a cuatro diplomáticos rusos en Irak y matar a un quinto", refleja el segundo comunicado. Los cuatro fueron secuestrados por hombres armados cerca de la Embajada rusa, situada en el distrito de Mansur, en el oeste de Bagdad, tras disparar contra su automóvil y causar la muerte a un empleado de la legación.

El segundo comunicado dio además a Moscú un plazo de 48 horas para retirarse de Chechenia y para liberar "a todos nuestros hermanos y hermanas en las cárceles rusas". De lo contrario, el Gobierno ruso "será responsable de las consecuencias", indica el comunicado sin especificar en qué consistirían exactamente.

Mientras tanto, un portavoz del Ejército nortaemericano, William Caldwell aseguró hoy que la búsqueda de los dos soldados se ha intensificado y que más de 8.000 militares iraquíes y estadounidenses están desplegados en la zona al sur de Bagdad donde los dos fueron abducidos.

En el marco de esta operación de búsqueda el contingente ha matado a tres insurgentes y ha detenido a otros 34 por su posible relación con el secuestros. Además, siete soldados estadounidenses han resultado heridos desde que comenzó el operativo de búsqueda el pasado viernes.