Crónica Irán/R.Unido.- Los soldados aseguran que fueron presionados para confesar que se encontraban en aguas iraníes

Actualizado: viernes, 6 abril 2007 19:46

Denuncian que Faye Turney permaneció aislada del resto y afirman que decidieron no resistir para evitar mayores problemas

LONDRES, 6 Abr. (De la corresponsal de EUROPA PRESS, Marta Altuna) -

Los marineros e infantes de marina que fueron capturados por las autoridades iraníes aseguraron hoy en rueda de prensa que estaban en aguas de Irak cuando fueron detenidos y que fueron presionados por las autoridades iraníes para que confesaran lo contrario. Asimismo, afirmaron que la única mujer del grupo, Faye Turney, permaneció en una celda aislada del resto de la tripulación y explicaron que durante la captura decidieron no resistir y obedecer a lo que les pidiera para evitar males mayores.

"Dejemos esto claro: al margen de lo que hayamos dicho en el pasado, estábamos en aguas iraquíes", afirmó el teniente Felix Carman, un galés de 26 años. "Estábamos a más de 1,7 millas náuticas de aguas iranies", prosiguió el teniente.

El teniente explicó que estaban efectuando una patrulla de rutina. "Nos acercamos a unos botes, como habíamos hecho en 66 operaciones similares en semanas anteriores, y llevamos a cabo un registro", explicó. Fue entonces cuando dos botes iraníes se acercaron y los militares británicos les explicaron lo que estaban haciendo.

"En lugar de dejarnos ir nos bloquearon, y comprobamos que tenían un plan definido", explicó. "Algunos se compartaban de forma agresiva apuntándonos con sus armas", prosiguió. "Nos dimos cuenta de que era imposible dialogar con ellos", declaró el militar.

Su versión coincidió con la del jefe de la unidad, el capitán Chris Air, de 25 años de edad. "Comprendimos que nuestros esfuerzos para discutir con esta gente no servirían para nada, y tampoco éramos capaces de calmar a algunos de estos individuos", afirmó. "Si lo hubiéramos hecho algunos de nosotros no estaríamos aquí, de eso estoy completamente seguro", aseveró.

"Comprendimos que si resistíamos podría producirse un enfrentamiento mayor, en el que no teníamos nada que ganar y cuyas consecuencias tendrían un impacto estratégico importante", prosiguió el oficial. "Tomamos la decisión consciente de no discutir con los iraníes y hacer lo que nos pedían", añadió. "La detención fue ilegal y nos sentimos muy orgullosos de nuestra conducta", declaró.

PRESIÓN PSICOLÓGICA

Según el teniente Carman, los militares iraníes les llevaron a Teherán, donde se enfrentaron a una "continua presión psicológica en los interrogatorios" y fueron tratados "agresivamente", ya que les pusieron pusieron contra la pared con las manos atadas y les vendaron los ojos.

"En la prisión estábamos sometidos a guerra psicológica, emocional. El aislamiento fue un gran factor, así como no tener ningún tipo de información de lo que pasaba en el mundo", declaró el oficial de la Marina. "Oíamos ruido de armas y eso nos ponia muy nerviosos", declaró Carman.

"Fuimos interrogados la mayoría de las noches, y nos ofrecieron dos opciones: si confesábamos que nos habíamos apartado, regresaríamos pronto en un avión a Reino Unido, si no nos enfrentaríamos a siete años de prisión", aseguró.

Los militares denunciaron el "escrutinio público" al que fueron sometidos por obligarles a aparecer en la televisión iraní. "Nos comportamos con honor y la Armada iraní tenía un plan determinado", declaró el capitán Air.

FAYE TURNEY

Los soldados británicos denunciaron la forma en la que fue utilizada Faye Turney, la única mujer del grupo, cuyas apariciones televisivas y cartas fueron ampliamente difundidas a los medios de comunicación y que no figuraba entre los seis militares que comparecieron hoy en la rueda de prensa.

"Fue separada inmediatamente de los hombres" y permaneció en una celda aislada del resto de la tripulación, explicó el capitán Air. "Estuvo cerca de cuatro días con la sensación de que sólo estaba ella allí", afirmó. "Se comportó admirablemente y mantuvo la dignidad", añadió.

En este sentido, el teniente Carman lamentó la utilización propagandística que se hizo con Turney. "La atención de la prensa hacia ella es muy incómoda y les pedimos que nos otorguen la privacidad que merecemos", manifestó.

Los militares explicaron también que durante su detención pasaron las noches en celdas de piedra, durmieron sobre mantas y permanecieron aislados, salvo unas pocas noches al final del cautiverio. Asimismo, según el teniente Carman, la conducta de los iraníes fue "humana" en el sentido de que les alimentaban tres veces al día, les daban agua y les permitían fumar, pero "desafortunadamente" no les dejaban hablar entre ellos "ni una palabra".