Crónica Líbano/Israel.- Israel toma posiciones en el sur del país y mantiene enfrentamientos por tierra con Hezbolá

Actualizado: domingo, 23 julio 2006 0:05

El 'NYT' asegura que EEUU está adelantando la entrega de bombas de precisión guiadas a Israel tras recibir la petición de Jerusalén

FRONTERA ISRAEL-LIBANO, 22 Jul. (EP/AP) -

Fuerzas del Ejército israelí ingresaron este sábado en Líbano a través de la frontera sur del país haciéndose con el control de la ciudad de Maurun al Ras y manteniendo enfrentamientos abiertos con la milicia chií libanesa Hezbolá por tierra, mar y aire mientras recibían apoyo de artillería y tanques desde varios puntos del territorio hebreo.

A pesar de la ofensiva de hoy, el Ejército israelí continúa asegurando que la incursión terrestre es sólo una operación "limitada" en el sur de Líbano. No obstante, la medida parece un refuerzo de los mecanismos empleados por la Armada desde que hace dos semanas militantes de Hezbolá atacasen ciudades del norte de Israel y acabasen con la vida de dos soldados y secuestrasen a otros dos, : Eldad Reguev, de 26 años, y Ehud Goldwasser, de 31.

Tras la incursión israelí, militantes de Hezbolá dispararon contra una base del Ejército israelí en la frontera con Líbano, hiriendo a un soldado, informaron fuentes militares. El suceso se produjo en la base de Nurit, cerca del poblado israelí de Avivim, informó un portavoz de las Fuerzas de Defensa de Israel. El ataque se realizó con disparos de francotirador desde el lado libanés de la frontera.

Posteriormente, militantes de Hezbolá aseguraron haber destruido tres tanques hebreos y haber causado numerosas bajas en las filas israelíes. En una retransmisión de su canal de televisión Al-Manar, la milicia indicó que habían logrado estos ataques gracias a las "heroicas hazañas" de sus "muyaedín".

ATAQUES A LAS COMUNICACIONES

Por otro lado, la aviación israelí bombardeó hoy torres de comunicación y de televisión en las montañas del centro y el norte de Líbano, según la Policía libanesa.

Los cazas dispararon misiles contra una estación de transmisión en Fatqa, en las montañas Keserwan, alcanzando las antenas de transmisión. En pocos segundos, la cadena de televisión libanesa Lebanese Broadcasting Corp., la principal del país, dejó de emitir.

Otro bombardeo alcanzó una torre de transmisión en Terbol, en el norte del país, según la Policía, sin que por el momento se conozca el alcance de los daños. Este es el primer gran ataque contra el corazón cristiano de Líbano en los diez días de bombardeos aéreos que han afectado esencialmente al sur y el este del país así como al sur de Beirut.

Las bombas israelíes, que azotan el país desde hace 11 días, han afectado principalmente a las zonas chiítas del sur y este del país y los barrios del sur de la capital. Mientras tanto, la artillería israelí continúa haciendo estragos en poblaciones del sur de Líbano, donde las fuerzas terrestres han realizado incursiones y tomaron el control de Maroun al Ras, según fuentes militares que pidieron el anonimato.

La incursión israelí en Maroun Al Ras se produjo tras mantener ataques durante toda la noche con bombas y artillería. Se cree que esta aldea es una de las posibles bases de lanzamiento de cohetes hacia Nazaret y otras ciudades del norte de Israel.

COMUNIDAD INTERNACIONAL

Paralelamente a esta ofensiva, la preocupación continúa aumentando entre la comunidad internacional y el secretario general adjunto de Naciones Unidas para Asuntos Humanitarios, Jan Egeland, aseguró hoy que se necesitarán más de 100 millones de dólares (79 millones de euros) para ayudar a los miles de libaneses que se han visto desplazados o han sufrido heridas desde el inicio de los bombardeos israelíes hace una semana.

Egeland indicó desde Chipre que lanzará una llamada a la comunidad internacional "urgiendo y mendigando" contribuciones para los próximos tres meses. "Es la mayor crisis", señaló asegurando que más de 50.000 personas se han visto forzadas a abandonar el país o se encuentran atrapadas en el mismo.

"Esto tiene que parar, no es un desastre natural. Es una crisis fabricada por el hombre", señaló Egeland durante una rueda de prensa desde el aeropuerto de Larnaca. En este mismo sentido, la Unión Europea informó este sábado de que coordinará las ayudas por parte de naciones europeas para la crisis en Oriente Próximo y enviará un equipo a Chipre que se hará cargo de los miles de evacuados que colapsan los puertos y hoteles de la isla.

En este sentido, la Comisión Europea indicó que Líbano ha solicitado medicinas, asilo y materiales de construcción así como equipamiento de combate y que por su parte, Chipre necesita ayuda para trasladar a los extranjeros evacuados a sus países de origen.

Nicosia aseguró que, aunque por el momento tiene alimentos, medicinas y hospedaje para todos los evacuados necesita diseñar planes de retorno. "Chipre se enfrenta a una situación que continúa dificultándose", señaló el comisario europeo de Medio Ambiente, Stavros Dimas. "Todos esos evacuados necesitarán transporte urgente desde Chipre a sus diferentes países de origen durante los próximos días", añadió.

Asimismo, indicó que la Unión Europea ha trasladado a los Veinticinco las principales necesidades de Líbano y cooperará con Naciones Unidas y Cruz Roja en las labores de ayuda. Por su parte, Italia ha enviado un barco a Líbano con alimentos, medicinas, mantas y agua para los desplazados por el conflicto, señaló la agencia de noticias ANSA.

Al mismo tiempo y según informaron fuentes oficiales norteamericanas, citadas hoy por el diario 'New York Times', la Administración estadounidense está adelantando la entrega de bombas de precisión guiadas a Israel, después de que este país así lo pidiera tras comenzar su campaña contra Hezbolá.

Según el rotativo, la decisión de acelerar la entrega de este armamento a Israel se tomó sin apenas debate en el seno de la Administración Bush. Las municiones que Washington enviará a Israel forman parte de un paquete de varios millones de dólares aprobado el año pasado y al que Israel puede recurrir cuando lo necesite, según las citadas fuentes.