Crónica O.Próximo.- Olmert propone a Abbas retirarse de Cisjordania cuando éste recupere el control sobre Gaza

Actualizado: martes, 12 agosto 2008 16:53

Según la nueva oferta, Israel se anexionaría el 7 por ciento de los asentamientos y los palestinos conseguirían en total el 98 por ciento

JERUSALÉN, 12 Ago. (EUROPA PRESS) -

El primer ministro israelí, Ehud Olmert, ha presentado al presidente de la Autoridad Palestina, Mahmud Abbas, una propuesta por la que se retirarán de Cisjordania una vez que éste recupere el control de la Franja de Gaza. Todo ello como parte de un acuerdo de principios sobre las fronteras, los refugiados y la seguridad entre Israel y un futuro Estado palestino.

Según informa hoy el diario israelí 'Haaretz', Olmert, que se reunió con Abbas esta semana, considera que es el momento de alcanzar un acuerdo de paz durante el tiempo que le queda como primer ministro. Ahora está esperando la respuesta de los palestinos.

El punto central de la propuesta de Olmert es el referente a las fronteras definitivas, que estarían basadas en una retirada de la mayoría del territorio de Cisjordania. Así, los palestinos recuperarían la totalidad de Negev, región situada junto a la Franja de Gaza, enclave con el que no habría puestos de control en los límites si la Autoridad Palestina vuelve a tener el control.

Fuentes oficiales israelíes aseguraron al citado periódico que el Gobierno facilitó a los palestinos unos mapas preliminares que ejemplifican las fronteras propuestas. Israel se quedaría, según la oferta de Olmert, con el 7 por ciento del territorio de Cisjordania, mientras que los palestinos recibirían lo equivalente a un 5,5 por ciento

Para Tel Aviv, el paso entre Gaza y Cisjordania sería establecido como compensación por su distancia física: aunque oficialmente permanezca en manos israelíes, conectaría los dos enclaves del Estado palestino, situación que no se repite desde antes de la Guerra de los Seis Días de 1967, cuando la Franja de Gaza estaba bajo control egipcio y Cisjordania formaba parte de Jordania.

Por otro lado, el territorio que se anexionaría Israel en Cisjordania incluiría los asentamientos judíos de Maaleh Adumim, Gush Etzion, los que rodean Jerusalén y algunas tierras del norte del enclave, mientras que la frontera sería similar al actual recorrido que sigue el muro.

Los asentamientos que quedan fuera de la propuesta serían desalojados en dos fases. En primer lugar, una vez que el acuerdo sea firmado, el Gobierno redactaría una legislación que compensara a los colonos que se trasladen voluntariamente a Israel o a los asentamientos que se anexionarían.

Según 'Hareetz', durante los últimos meses Olmert ha aprobado la construcción de miles de bloques de viviendas en estos nuevos asentamientos, la mayoría en los alrededores de Jerusalén, y algunos estarían previstos para estos voluntarios.

El segundo paso consistiría en que, una vez que los palestinos completaran una serie de reformas internas y fueran capaces de cumplir por completo el acuerdo, Israel retiraría a cualquier colono que aún quedase al este de sus nuevas fronteras.

CONDICIONES

Pero el Gobierno israelí no ha dejado ningún cabo suelto en su propuesta, y es que si se firmase el acuerdo Tel Aviv recibiría los territorios de los asentamientos de forma inmediata, mientras que la tierra dispuesta para los palestinos y el paso libre entre Gaza y Cisjordania sólo serían transferidos después de que la Autoridad Palestina recuperara el control de la Franja.

De este modo, Olmert podría decir a la opinión pública de su país que Israel está recibiendo el 7 por ciento de las tierras de Cisjordania y que las concesiones que el Gobierno tiene que realizar son pospuestas hasta el fin del Ejecutivo 'de facto' de Hamás. Según 'Haaretz', Abbas también podría decir a la población palestina que el acuerdo es un éxito porque recuperaría el 98 por ciento de Cisjordania junto con la promesa de retirada de todos los colonos.

En comparación con otras negociaciones previas, esta propuesta de Olmert está a caballo entre la que en julio de 2000 presentó el entonces primer ministro, Ehud Barak, al líder palestino Yasir Arafat en Camp David, y la de las conversaciones de Taba en enero de 2001.

Las ofertas que han hecho hasta ahora los palestinos se parecen a las de la era Arafat y por las que se permitiría a Israel quedarse con sólo unas pocas tierras de Cisjordania.

SEGURIDAD

En la oferta entregada por Olmert a Abbas esta semana, Israel también ha detallado un nuevo modelo de seguridad diseñado por un equipo liderado por el comandante de la Fuerza Aérea, general Ido Nehoshtan. Esta propuesta también ha sido enviada a Washington en un esfuerzo por obtener la aprobación norteamericana al esfuerzo israelí en las negociaciones.

En este sentido, se incluye una demanda de que el futuro Estado palestino se desmilitarice por completo y carezca de Ejército. La Autoridad Palestina, por el contrario, propone la existencia de un cuerpo de fuerzas de seguridad que les permita defenderse ante "amenazas externas", explican las fuentes oficiales israelíes.

REFUGIADOS Y JERUSALÉN

En cuanto al asunto de los refugiados, la oferta de Olmert rechaza el "derecho de retorno" y establece que los refugiados sólo podrían regresar al futuro Estado, aunque habría casos excepcionales de palestinos que podrían entrar en Israel por una reunificación familiar. La propuesta incluye una fórmula detallada, aunque muy compleja, para solucionar el problema.

La cuestión de Jerusalén es más complicada. De hecho, las dos partes ya habían acordado posponer las conversaciones al respecto, lo que indica que Olmert habría cedido a las amenazas del partido ultraortodoxo Shas de abandonar la coalición de Gobierno si el estatus de la ciudad era puesto en la mesa de negociaciones.

RESPUESTA

Esta propuesta de Israel no ha sido muy bien acogida por los palestinos, tanto de la Autoridad Palestina como de Hamás. Ahmed Abdel Rahman, asesor de Abbas, opinó que se trata simplemente de una información de la prensa y de un "globo sonda para mostrar que Israel es serio en las negociaciones".

En este sentido, aseguró que no tienen conocimiento de ningún plan propuesto por Tel Aviv, aunque manifestó su optimismo acerca de la creación de un Estado palestino con Jerusalén como capital antes de finales de este año.

Para el portavoz de Abbas, Nabil Abu Rdainah, la propuesta muestra una "falta de seriedad" porque no ofrece una solución con respecto a Jerusalén y condiciona la retirada de Cisjordania a la recuperación de la Franja de Gaza. "El lado palestino sólo aceptará un Estado palestino con continuidad territorial, con Jerusalén como capital, sin asentamientos y con las fronteras del 4 de junio de 1967", explicó.

En opinión de Hamás, la propuesta sólo es una "información de prensa que, de ser correcta, carece de "seriedad". Según afirmó, la oferta pretende "extorsionar" a la Autoridad Palestina y mantener su "opresión" sobre la población palestina.

Además, el movimiento islámico prometió que no cederá el control de la Franja de Gaza a menos que resuelva todos los asuntos pendientes con Al Fatá a través del diálogo.