Crónica O.Próximo.- Olmert propone que los principales asentamientos de Cisjordania sean "parte inseparable" de Israel

Actualizado: jueves, 4 mayo 2006 22:14

Afirma ante la Knesset, que aprobó hoy su nuevo gobierno, que los asentamientos dispersos ponen en peligro el carácter judío de Israel

JERUSALÉN, 4 May. (EP/AP) -

El primer ministro israelí en funciones, Ehud Olmert, presentó hoy ante la Knesset (Parlamento) su plan de retirada parcial de Cisjordania, que prevé la retirada de los asentamientos aislados, que a su juicio ponen en peligro la existencia de Israel como Estado judío, y que los principales bloques de asentamientos queden para siempre como "parte inseparable" de Israel.

La Cámara aprobó esta tarde, por 65 votos a favor y 49 en contra, el nuevo gobierno de coalición de Olmert --ganador de las elecciones legislativas del pasado mes de marzo al frente de la formación Kadima-- y confirmó a los 25 ministros, que se habían reunido previamente para la ceremonia de la foto de familia en la residencia del presidente de Israel, Moshe Katsav.

Olmert jurará oficialmente como primer ministro el próximo domingo 7 de mayo, cuatro meses después de asumir interinamente el cargo tras el infarto cerebral sufrido, el pasado 4 de enero, por el primer ministro oficial, Ariel Sharon. El nuevo gabinete está formado por representantes de Kadima, Partido Laborista, Partido de los Pensionistas y los ultraortodoxos del partido Shas.

Al término del debate parlamentario de hoy, Olmert definió sus principales líneas de actuación diplomáticas, económicas y sociales. A juicio de Olmert, la retirada de asentamientos de la franja de Gaza y del norte de Cisjordania llevada a cabo el pasado verano sólo fue un primer paso, y añadió que Israel debería separarse claramente de los más de dos millones de palestinos residentes en Cisjordania si quiere mantener su carácter de Estado tanto democrático como judío. "La continuación de los asentamientos dispersos en Cisjordania crea una mezcla inseparable de poblaciones que amenazará a la existencia del Estado de Israel en cuanto que Estado judío", añadió.

Una retirada de este tipo contaría con el apoyo de la sociedad israelí y pondría en poder de Israel asentamientos más importantes, prosiguió. "El movimiento de los asentamientos judíos y sus principales bloques serán para siempre una parte inseparable del Estado de Israel", aseveró.

EL PLAN DE RETIRADA

El plan de retirada parcial de Jerusalén diseñado por Olmert --y que el Gobierno está dispuesto a concretar de forma unilateral si fracasan los esfuerzos para reanudar las negociaciones de paz-- pretende la separación de israelíes y palestinos y el trazado definitivo de las fronteras de Israel en 2010.

De salir adelante, Israel desmantelaría decenas de asentamientos judíos con decenas de miles de habitantes, que serían trasladados a asentamientos más grandes en Cisjordania que Israel espera retener según un plan de paz. El plan podría empezar a aplicarse en un plazo de dos años, según informaron fuentes políticas citadas por el diario israelí 'Haaretz'.

Además, según uno de los artífices del plan de retirada parcial de Cisjordania, el diputado Otniel Schneller (de Kadima), el proyecto prevé la división de Jerusalén, de manera que Israel se quedaría con las áreas judías y los santos lugares y los palestinos se deberían contentar con casi todas las urbanizaciones árabes de la ciudad.

Concretamente, la Ciudad Vieja de Jerusalén, sus santuarios y las urbanizaciones adyacentes se regirían "por un régimen especial", aunque seguirían bajo la soberanía israelí, afirmó Schneller en una entrevista con The Associated Press.

Durante su intervención parlamentaria, Olmert advirtió de que preferiría que la reanudación de las negociaciones con los palestinos se llevara a cabo de acuerdo con las previsiones de la 'Hoja de ruta', el plan internacional de paz propuesto por el Cuarteto para Oriente Próximo (formado por Estados Unidos, la UE, Rusia y la ONU). No obstante, si el plan fallara, añadió, Israel debería actuar unilateralmente para constituir unas fronteras "deseables", claramente distintas de las actuales.

Israel ha anunciado que dará al nuevo Gobierno palestino, en poder del Movimiento para la Resistencia Islámica (Hamás), tiempo para que reconozca al Estado judío, acepte los acuerdos pasados y abandone la lucha armada. Hasta la fecha, Hamás ha rechazado estas exigencias. Por su parte, Israel ha cortado todos los vínculos con la "entidad enemiga", y posiblemente acabe por trazar sus fronteras de manera unilateral.

Mientras, el presidente palestino, Mahmud Abbas, aprovechó la entrada en funciones del nuevo Gobierno israelí para reiterar a Olmert su propuesta de retomar las negociaciones de paz inmediatamente. "Tienes un socio serio. Somos un socio para las negociaciones", declaró en una entrevista publicada por el diario hebreo 'Maariv'.

EJECUTAR A LOS DIPUTADOS ÁRABES

La sesión parlamentaria de hoy tuvo su momento más tenso cuando el diputado Avigdor Lieberman, presidente de la formación ultraderechista Yisrael Beiteinu, afirmó ante la tribuna que los diputados árabes israelíes que recientemente se reunieron con los dirigentes de Hamás deberían ser juzgados y ejecutados por "cooperar con el enemigo".

Lieberman, cuyo partido no llegó a un acuerdo con Kadima para entrar en el gobierno de coalición, afirmó que "la Segunda Guerra Mundial concluyó con los juicios de Nuremberg y la ejecución de los dirigentes nazis". "No sólo ellos, sino también los que colaboraron con ellos" fueron ejecutados, añadió. "Espero que hagamos lo mismo con los colaboracionistas en esta casa", añadió, en referencia a la Knesset.

En respuesta a estas palabras, el diputado laborista Raleb Majadele calificó a Lieberman de "racista". Por su parte, el diputado Ahemd Tibi, de la formación árabe Raam-Taal, afirmó que estos "comentarios racistas" han sido hechos por "un hombre para quien el fascismo se ha convertido en una forma de vida y el racismo una herramienta de trabajo". Otro diputado de Raam, Ibrahim Tzartzur, ha presentado una denuncia contra Lieberman ante la Comisión Ética de la Knesset.

Durante la sesión parlamentaria fue elegida Dalia Itzik presidenta de la Cámara, la primera mujer en ejercer el cargo en los 58 años de historia de Israel. "Procede de la nación, representa a la nación, conoce el pulso de la nación y ama a la nación; es una mujer muy inteligente", afirmó el veterano dirigente Simon Peres, quien presidía provisionalmente la Knesset por ser el diputado de mayor edad.