Crónica Pakistán (2).- Los grupos pro DDHH lamentan el retroceso democrático que supone la muerte de Bhutto

Actualizado: viernes, 28 diciembre 2007 21:57

Piden una comisión internacional imparcial que investigue el asesinato de la líder opositora

MADRID, 28 Dic. (EUROPA PRESS) -

Las organizaciones internacionales de defensa de los Derechos Humanos condenaron el asesinato de la líder opositora paquistaní Benazir Bhutto, un acto que calificaron de grave retroceso en el proceso democrático. La mayoría coincidieron además en pedir la constitución de una comisión independiente que investigue el atentado y la moderación en la respuesta gubernamental al ataque.

Amnistía Internacional (AI) condenó el asesinato de Bhutto y de los quince miembros del Partido del Pueblo Pakistaní (PPP) en el atentado de ayer, un acto que "nunca está justificado". "Es horrible ver la vida de alguien cercenada de una forma tan brutal. Ataques como estos nunca pueden estar justificados. Suponen una violación del Derecho Internacional y de las reglas del comportamiento democrático", declaró la directora del programa para Asia de AI, Catherine Baber.

"Sabemos que el Gobierno del presidente (Pervez) Musharraf recibirá enormes presiones para perseguir a los culpables y mantener la calma y la estabilidad en el país, pero Amnistía Internacional pide al presidente Musharraf y a las fuerzas de seguridad que muestren contención y salvaguarden la ley", agregó Baber. "No puede permitirse que el asesinato de Benazir Bhutto se convierta en un revés para el gobierno civil o desemboque en un ataque a las libertades civiles", advierten desde AI.

En la misma línea, la Federación Internacional de Ligas de Derechos Humanos (FIDH), organismo internacional con una estrecha relación con organizaciones como la ONU, la UE o el Consejo de Europa, condenó "enérgicamente" el atentado.

ABUSOS DEL GOBIERNO

"A dos semanas de las elecciones legislativas la FIDH considera que este acto criminal constituye una escalada espectacular en la generalización de la violencia política en Pakistán, alejando cada día toda esperanza de democracia en este país", indica el comunicado.

La FIDH aprovechó además para insistir en las denuncias realizadas por su filial en Pakistán, Human Rights Commission of Pakistan (HRCP). "Después de haber intervenido sobre el poder judicial y más particularmente sobre el Tribunal Supremo, haber silenciado medios de comunicación, abogados y defensores de los Derechos Humanos. Después de haberse organizado una reelección presidencial muy dudosa, Musharraf preparaba un simulacro de elecciones legislativas donde la corrupción electoral parecía, según HRCP, ya flagrante", indica.

"Estas violaciones de los derechos fundamentales constituyen y crean las condiciones de una radicalización y de una generalización de la violencia política en Pakistán", según la FIDH.

Además emplazan a las autoridades paquistaníes a realizar una investigación "independiente e imparcial" para esclarecer el asesinato de Bhutto y llevar a sus responsables ante la justicia con respeto al derecho a un proceso equitativo. Esta investigación sería compatible, según la FIDH con una comisión internacional de investigación compuesta principalmente por miembros independientes de Naciones Unidas.

CONEXIÓN EJÉRCITO-YIHADISTAS

El centro de estudios International Crisis Group (ICG) también quiso mostrar su condena al atentado que costó la vida a Bhutto e hizo hincapié en la necesidad de que el Consejo de Seguridad de la ONU se reúna con carácter de urgencia para crear una comisión de investigación internacional. El ICG asegura que esta investigación debe desarrollarse de la forma más independiente posible "debido a los vínculos que mantienen desde hace mucho tiempo el Ejército paquistaní y los grupos yihadistas".

En cualquier caso, el ICG considera el asesinato de Bhutto un "serio golpe" al resurgir de la democracia en Pakistán, así como para la estabilidad del país. "La comunidad internacional debe ahora unirse para presionar en pro de una investigación que esclarezca completamente los asesinatos" de la líder del PPP y sus colaboradores.

"Enviamos nuestras condolencias a su familia y al pueblo de Pakistán", declaró Gareth Evans, presidente del ICG. "Desde la década de 1980 (Bhutto) ha sido una fuerza política vital a menudo subestimada. Las perspectivas de democracia y estabilidad para Pakistán son mucho menores ahora sin ella", agregó.

Para el ICG, el Gobierno interino respaldado por los militares golpistas no está en posición de llevar a cabo una investigación imparcial del asesinato, por lo que apela al Consejo de Seguridad para la creación de una comisión que investigue quién ordenó y perpetró el crimen.

"Dada la larga relación entre el Ejército de Pakistán y los grupos yihadistas este sería el único modo de sacar adelante una investigación imparcial y creíble", explica el comunicado.

PIDEN CALMA

La organización Human Rights Watch (HRW), en cambio, pidió la creación de una comisión de investigación independiente por parte de las autoridades paquistaníes, pero sobre todo insistió en el llamamiento a la calma dirigido al Gobierno y a los seguidores de Bhutto.

HRW lamentó en su comunicado el "trágico" asesinato de Bhutto, "un suceso con graves implicaciones para la transición hacia la democracia de Pakistán".

"La violencia política de esta naturaleza se ha cobrado demasiadas vidas inocentes en Pakistán y debe parar", afirmó el investigador de HWR para el Sur de Asia Ali Dayan Hasan. "Benazir Bhutto era una demócrata que creía en la supremacía de la Constitución y a lo largo de su carrera buscó el poder a través de las urnas. Murió haciendo campaña para pedir el voto y unas elecciones libres", agregó Hasan.

"Dada las acusaciones públicas y previas del Gobierno y la ausencia de independencia judicial, es absolutamente esencial una investigación independiente y transparente", opinó Hasan. El Gobierno y las fuerzas de seguridad deberían garantizar los derechos fundamentales y que la gente pueda expresar públicamente sus quejas y su ira, agrega HRW.