Los padres están convencidos de que Madeleine está viva pese a que la prensa lusa asegura que la Policía descarta el secuestro LISBOA, 7 Ago. (De la corresponsal de EUROPA PRESS, Patricia Ferro) -
La desaparición de la pequeña Madeleine McCann hace 96 días ha dado un giro de 360 grados y después de la impresionante campaña que a nivel mundial realizaron sus padres para encontrarla, ahora las cosas han cambiado. La nueva línea de investigación es que la niña ha muerto el mismo día que se denunció su desaparición y en el dormitorio de sus progenitores en el apartahotel de la Praia da Luz en el Algarve, donde estaban de vacaciones.
Además, ahora parece que el matrimonio McCann y su círculo más cercano son sospechosos, según la prensa portuguesa, mientras las autoridades lusas se muestran cautelosas y no confirman estas informaciones divulgadas por los diarios portugueses, aunque tampoco las desmienten. Por su parte, los padres de la pequeña se mostraron convencidos hoy de que hija "sigue viva".
La prensa portuguesa, citando fuentes próximas a la investigación, asegura que la hipótesis del secuestro está totalmente descartada, debido a la aparición de sangre en el cuarto del matrimonio McCann y a las versiones contradictorias de padres, familiares y amigos. Ahora la investigación se centra en saber si la muerte de la pequeña de 4 años fue un homicidio o un accidente por negligencia.
'Diario de Noticias' asegura, citando fuentes próximas a la investigación, que la Policía Judicial (PJ) portuguesa sabe desde hace un mes que Madeleine está muerta. Esto no ha sido confirmado por el portavoz de la PJ, Olegario de Sousa, pero tampoco lo ha desmentido, aunque sí ha admitido la posibilidad de volver a interrogar a Kate y Gerry McCann y a su círculo más cercano. Todo dependerá de los resultados de los análisis de los restos de sangre encontrados en el cuarto, dijo el inspector.
Además, se sabe que el todoterreno que los McCann utilizaron hasta el día de la desaparición ha sido revisado, el lunes por la tarde, de arriba abajo por las autoridades, que también volvieron a inspeccionar los coches del Robert Murat, hasta ahora único sospechoso formal, y personas cercanas a él.
Por otro lado, 'Diario de Noticias' indica que hay versiones contradictorias de padres, familiares y amigos sobre lo ocurrido el día de la desaparición. Al parecer, hay un vacío de tres horas, entre las seis y las nueve de la noche, sobre lo que aconteció.
Además, se hace eco de las supuestas palabras de Kate McCann cuando llegó al restaurante, donde estaban cenando con unos amigos, tras descubrir que la niña no estaba en el cuarto, "se la han llevado, ellos se la han llevado", dijo. Después, tras avisar a la policía, un vecino asegura que oyó decir a la madre "algo ha fallado, algo ha fallado". Palabras un tanto extrañas para la situación, en opinión del rotativo.
Ante esta situación, dice el diario, las autoridades portuguesas y británicas están desde el inicio de este proceso "atentas al matrimonio McCann" al que le han dado "total libertad de movimientos para vigilarlo mejor" tanto durante su estancia en el Algarve como en los desplazamientos que han realizado a otros países para encontrar a su hija. Pero también están vigilando a los amigos del matrimonio que estaban de vacaciones con ellos.
ESTÁ VIVA
Mientras toda esta información surgía, el matrimonio McCann iba cambiando de actitud hacia la prensa y si antes eran ellos los que la llamaban ahora la rehúyen y se tapan el rostro. Aunque ante el alubión de críticas por este comportamiento decidieron hablar y dieron hoy una entrevista a la televisión británica BBC y a Sky News. En ella, aseguran que están convencidos de que Madeleine sigue viva y que "es duro" ver a su familia objeto de investigación, sin embargo, reconocen que los familiares deben ser tratados como cualquier otra persona y que están satisfechos de cooperar con la policía.
Además, consideran que "da ánimos ver que la Policía está analizando cuidadosamente todas las hipótesis" e indican que "fuimos avisados por las autoridades con mucha antelación de que estos acontecimientos iban a producirse". Aunque no quisieron comentar las últimas noticias para no perjudicar la investigación, el padre comentó que la Policía afirmó en varias ocasiones que "estaban buscando a Madeleine viva y no muerta".
NUEVAS INVESTIGACIONES
Estos nuevos indicios han desencadenado nuevos registros en el apartamento del Ocean Club y en casa de Robert Murat. La PJ y agentes de la Policía británica acompañados por dos perros rastreadores, especialmente entrenados para detectar cadáveres y seguir rastros, descubrieron restos de sangre en la habitación de los padres de Madeleine.
Al parecer ésta no había sido detectada con anterioridad porque intentaron borrarla y los restos eran muy pequeños y los confundieron con una mancha. Según 'Jornal de Noticias', uno de los dos cocker spaniel descubrió restos de sangre en una pared y el otro detectó el olor de un cadáver en el mismo local.
Conjugados esos dos factores, la prensa lusa insiste en que gana consistencia la tesis de que la niña hubiese muerto en la habitación de los padres. Ahora, el objetivo es intentar reconstruir el posible recorrido de la pequeña después de haber salido del apartahotel en el que se hospedaba la familia McCann.
NUEVO SOSPECHOSO
En paralelo a todo esto, la PJ reveló que hay un nuevo sospechoso, al que están vigilando. Un hombre de unos 40 años, que al parecer fue visto por varios testigos la noche de autos llevando a una niña en brazos envuelta en una manta y aparentemente dormida. Esta persona, que según 'Diario de Noticias' es de origen africano y nacionalidad británica, fue visto en compañía de Murat y de dos periodistas después de la desaparición de Madeleine y, según testigos, con los padres de la niña antes de que todo esto ocurriese.
Por otro lado, el abogado de Robert Murat, hasta ahora el único sospechoso formal pero sin pruebas que lo incriminen, admitió que pedirá una indemnización al Estado portugués. Aunque reconoció que por ahora, lo más importante es que su cliente deje de ser sospechoso.
También hoy en su edición digital el periódico 'The Times' apunta una nueva hipótesis, la de un pederasta suizo que vivía en España y se suicidó el martes. Éste habría raptado a una niña de 5 años, que todavía está desaparecida, y supuestamente estuvo en el Algarve en las fechas en que Madeleine desapareció. Sin embargo, la PJ ha descartado esta pista.
La pequeña Madeleine McCann, de cuatro años, desapareció hace poco más de tres meses cuando dormía junto a sus hermanos gemelos de dos años en la habitación del apartahotel del Ocean Club, en la Praia da Luz, en el Algarve, mientras sus padres, Kate y Gerry, cenaban en un restaurante cercano con unos amigos.
Desde ese momento, el matrimonio McCann inició una campaña por todo el mundo para encontrar a su hija y gracias a donaciones voluntarias hay una recompensa de más de cuatro millones de euros por una pista fiable para encontrar a la niña. Hasta ahora, se siguieron un montón de pistas de personas que supuestamente habían visto a la pequeña Maddie, como se la conoce familiarmente, en distintas partes del globo, pero ninguna ha tenido éxito. La última fue la semana pasada en Bélgica y todavía se esperan los resultados.
