Crónica R.Unido-Blair sacrifica a Clarke en una gran crisis de Gobierno tras el varapalo al laborismo en las municipales

Actualizado: viernes, 5 mayo 2006 18:27

Brown, aspirante a primer ministro, se mantiene en su puesto y también las criticadas ministras de Sanidad y Cultura

LONDRES, 5 May. (EUROPA PRESS) -

El hasta ahora ministro británico de Interior, Charles Clarke, ha sido el gran sacrificado de la remodelación de Gobierno adoptada hoy por el primer ministro británico, Tony Blair, quien hizo oficial la esperada crisis de Gobierno tras las elecciones municipales de ayer, en las que los laboristas perdieron 19 ayuntamientos y 319 concejales.

Según los medios locales, el varapalo electoral no hizo más que acelerar una remodelación del gobierno que Blair tenía en agenda para el próximo lunes, pese a que en las últimas semanas no había parado de defender a su ministro de Interior, inmerso en un escándalo tras la puesta en libertad de más de un millar de criminales extranjeros a los que no se consideró siquiera deportar una vez cumplida su condena.

Blair remplazó a Clarke por el hasta ahora ministro de Defensa, John Reid, que a su vez será sustituido por el secretario jefe del Tesoro Des Browne. Sin embargo, se salvó de la criba el viceprimer ministro, John Prescott, afectado por un escándalo de infidelidad conyugal, aunque perderá competencias en favor de Ruth Kelly, que deja de ser ministra de Educación para ocuparse de la cartera de Desarrollo Local.

Kelly también asume competencias relacionadas con la mujer del Ministerio de Cultura, a cuyo mando se mantiene Tessa Jowell. La ministra de Cultura se vio implicada también en un escándalo por los vínculos de su marido con el ex primer ministro italiano, Silvio Berlusconi.

La sorpresa de la remodelación fue que, además, Blair decidió prescindir de otro de los pesos pesados de su gabinete, Jack Straw, que abandona la cartera de Exteriores para pasar a ser el jefe de la Cámara de los Comunes. Algunos medios británicos afirman que el propio Straw quien había pedido el cambio.

La crisis deja en su puesto a sólo uno de los ministros con puestos clave en el gabinete: el ministro de Finanzas, Gordon Brown, considerado aspirante a remplazar a Blair como jefe de Gobierno antes de que termine la legislatura.

Charles Clarke no recibió con agrado su salida del Ejecutivo aunque dijo entender "su derecho a hacerlo" y prometió en un comunicado que se mantendrá fiel al Gobierno. Blair afirmó que aunque sentía perder a Clarke como ministro, consideraba que "era muy difícil, dado el nivel de genuina preocupación pública, que Charles continuara en el puesto", según informa la BBC. Al parecer, según Skynews, se ha negado a ocupar otros puestos en el Gobierno y preferido volver a su escaño de diputado.

Por su parte, Straw abandona Exteriores para encabezar a los laboristas en los Comunes, cargo que hasta ahora ocupaba Geoffrey Hoon, que en la remodelación gubernamental pasará a ser secretario de Estado para Europa. La jefatura de la Diplomacia la ocupará Margaret Beckett, quien hasta ahora era ministra de Medio Ambiente y considerada la gran ganadora de la remodelación.

En cuanto al viceprimer ministro, John Prescott, otro de los miembros del gabinete en el punto de mira en los últimos días tras reconocer que había mantenido una relación extraconyugal con una de sus secretarias, Blair le ha confirmado en su cargo, así como en el de 'número dos' del Partido Laborista.

El actual secretario de Estado para la UE, Douglas Alexander, será ministro de Transportes y Secretario de Estado para Escocia. El actual ministro de Comercio, Alan Johnson, pasará a ocupar la cartera de Educación, en sustitución de Ruth Kelly, y David Miliband remplazará a Beckett en Medio Ambiente.

Desde las filas conservadoras, su líder, David Cameron, subrayó que la remodelación "es sólo el principio" y "habrá mucho más que una remodelación, (porque) lo que necesitamos en este país es una sustitución". En este sentido, consideró que los conservadores "están demostrando que hay una alternativa amplia que se está construyendo mientras que el Gobierno se está hundiendo". Los 'tories' han sido los grandes vencedores de las elecciones de ayer.

DERROTA LABORISTA EN LAS MUNICIPALES

Con 175 de los 176 ayuntamientos en juego ya escrutados, los 'tories' han logrado un total de 68, y 1.777 concejales. Eso representa una ganancia de 11 ayuntamientos y de 300 concejales, mientras los laboristas han perdido 18 y 319 concejales. Los laboristas se quedan así con 27 ayuntamientos y 1.305 concejales.

Según los resultados preliminares, los 'tories' lograron un 40% de los votos, los liberaldemócratas un 27% y los laboristas un 26%, con una participación, el 36%, tres puntos menos que en 2004. Para el laborismo, los resultados son los peores jamás registrados en unas municipales, pero la caída no ha sido tan brutal como algunos habían previsto.

Los liberaldemócratas, por su parte, no han avanzado tanto como se esperaba, y los ultraderechistas del British National Party (BNP) han conseguido más que doblar su presencia, pasando de 20 a 46 escaños.