El acusado no fue condenado a muerte, como pedía la fiscalía, por la moratoria impuesta desde que Rusia entró en el Consejo de Europa
MOSCU/VLADIKAVKAZ (RUSIA), 26 May. (EP/AP) -
Tras un año de juicio, el Tribunal Supremo de Osetia del Norte condenó hoy a cadena perpetua al único superviviente de los asaltantes que tomaron como rehenes más de un millar de personas en una escuela de Beslán, en esta región del sur de Rusia, en septiembre de 2004, tras declararle culpable de asesinato y terrorismo. El tribunal explicó que no se le había impuesto la pena de muerte debido a la moratoria vigente en Rusia sobre la pena capital.
Nur-Pashi Kulayev, de 25 años, fue declarado culpable de tomar rehenes y responsable de la muerte de 331 personas y de infligir daños materiales por valor de 34 millones de rublos (un millón de euros).
El juez del Tribunal Supremo de Osetia del Norte, Tamerlan Aguzarov, dijo que Kulayev había detonado una bomba que provocó daños a los rehenes y a las tropas gubernamentales. Asimismo, afirmó que 16 rehenes que los milicianos ejecutaron el primer día del asalto murieron en parte debido a las acciones de Kulayev. Kulayev también fue declarado culpable de disparar contra niños y otros rehenes que intentaron escapar de la escuela en el caos del tercer día. El acusado había afirmado ante el tribunal que aunque participó en el asalto, no mató a nadie.
"Kulayev se merece la pena de muerte, pero es condenado a cadena perpetua porque está en vigor una moratoria" sobre la pena capital, explicó Aguzarov. Los fiscales habían pedido la pena de muerte para Kulayev, pero Rusia suspendió la pena capital cuando entró en el Consejo de Europa hace diez años.
Según el magistrado, el acusado "actuó con calma y adecuadamente" durante el juicio y por tanto "puede asumir la responsabilidad". Asimismo, dijo que las alegaciones iniciales de Kulayev de que su testimonio inicial le había sido arrancado bajo presión eran "injustificadas". El condenado, de origen checheno, dijo haber entendido el veredicto y ahora tiene diez días para apelar la sentencia.
PENA DE MUERTE
Por su parte, el fiscal general adjunto, Vladimir Kolesnikov, afirmó hoy mismo que no descarta que pueda suspenderse la moratoria impuesta sobre la pena capital, después de instituirse en Chechenia el tribunal de jurados.
Kolesnikov expresó su satisfacción por la sentencia y, preguntado sobre si convendría restaurar la pena de muerte en este caso concreto, afirmó que la sentencia ya está dictada y debe ser cumplida.
También el subjefe de la Fiscalía General de Rusia, Nikolay Shepel, se mostró satifecho con el veredicto, proque el acusado fue condenado por todos los cargos. La sentencia, dijo, es "justa y legítima".
Sin embargo, los familiares de las víctimas no quedaron tan contentos. "El castigo debería ser adecuado al crimen, la muerte privaría a Kulayev de esas pequeñas alegrías que aún puede vivir durante su cadena perpetua", declaró una mujer, Aneta Gadiyeva, que perdió a su hija en el atentado.
Las madres de las víctimas llenaron hoy a rebosar la sala donde se leyó el veredicto, algunas de ellas con pancartas que decían "No hay perdón para las autoridades que permitieron que Beslán sucediera", otras con fotos de los niños muertos, o de los tanques de las fuerzas de seguridad que irrumpieron en el colegio tras tres días de secuestro y a quienes muchos culpan de la gran cantidad de víctimas. Algunos de los familiares trataron de golpear al condenado cuando se lo llevaban de la sala.
El drama de Beslán comenzó el 1 de septiembre de 2004, el primer día de clase, cuando un grupo de 32 terroristas defensores de la independencia dechena tomaron como rehenes a 1.300 personas, entre alumnos, padres y profesores, en la Escuela número 1 de la localidad. Tres días después, las fuerzas de seguridad entraron al rescate, y entre las bombas detonadas por los terrroristas y los enfrentamientos murieron 331 personas, más de la mitad de ellos niños. Los disparos de las tropas causaron un incendio que hizo derribarse el edificio.
Kulayev fue el único terrorista que sobrevivió, y los habitantes del pueblo casi le lincharon cuando le descubrieron escondido bajo un camión.
INVESTIGACION MAS AMPLIA
Por otro lado, Shepel afirmó que la investigación del atentado contra el colegio de Beslán dio origen a la apertura de un expediente mucho más amplio sobre una red del terrorismo internacional instalada en el sur de Rusia con el objetivo de propiciar la secesión de algunas repúblicas, según la agencia Ria Novosti.
Según Shepel, la toma de rehenes en la escuela de Beslán, los ataques contra Nazran y Nalchik, las explosiones en Moscú y otros crímenes de envergadura guardan relación entre sí y son eslabones de una cadena de acciones organizadas por esta red terrorista.
Durante la investigación de este caso, precisó, los agentes de seguridad han eliminado a 30 terroristas que pensaban realizar atentados en el sur de Rusia, y detenido a otras 26 personas que en la actualidad están siendo procesadas.
