EEUU llama a la celebración de nuevas elecciones, mientras que Rusia elogia su limpieza y legitimidad
BRUSELAS, 20 Mar. (EUROPA PRESS) -
Los ministros de Asuntos Exteriores de la Unión Europea amenazaron hoy con imponer sanciones, como la restricción de visados, a las autoridades de Bielorrusia por no respetar los estándares democráticos en las elecciones presidenciales celebradas ayer, y mostraron su disposición a aumentar las ayudas a los partidos de oposición y a la sociedad civil.
"Hemos iniciado una discusión hoy, que continuaremos, y que incluye la posibilidad de tomar medidas restrictivas contra los responsables de los actos en el curso del proceso electoral", dijo la jefa de la diplomacia austriaca y presidenta de turno del Consejo, Úrsula Plassnik. También el ministro de Asuntos Exteriores francés, Philippe Douste-Blazy, abogó por "sanciones vigorosas" para "aumentar la presión contra (el primer ministro Alexander) Lukashenko".
"Nos gustaría seguir trabajando con los ciudadanos de Bielorrusia y al mismo tiempo vamos a ser firmes con los líderes de Bielorrusia hasta que acepten avanzar hacia un país democrático con el que la mayoría de Bielorrusia y la UE sueña", afirmó por su parte el Alto Representante de la UE para la Política Exterior y de Seguridad Común, Javier Solana.
Los Veinticinco instaron al Gobierno de Minsk a permitir el derecho de asamblea y la libertad de expresión de los ciudadanos, y le avisaron de que "no amenace ni detenga a los que ejercen sus derechos políticos en los próximos días".
Plassnik agregó que los Veinticinco comparten plenamente la evaluación realizada por la misión electoral de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE), según la cual las elecciones presidenciales no respetaron los "estándares internacionales", y durante la campaña se produjeron "abusos arbitrarios del poder del Estado para proteger al presidente en ejercicio".
Asimismo, recordó que durante los últimos meses la UE ha pedido repetidamente a las autoridades bielorrusas que cumplan los estándares internacionales para asegurar un proceso electoral "libre y justo" y ha condenado los actos de "acoso, detención y violencia" contra los candidatos de la oposición.
COMPROMISO CON LA POBLACION
"Lamentamos la política de autoaislamiento de las autoridades bielorrusas, y al mismo tiempo quiero subrayar nuestra voluntad de seguir comprometidos con la población bielorrusa", apuntó la jefa de la Diplomacia comunitaria. A juicio de la UE, la campaña electoral ha permitido "la emergencia de fuerzas pluralistas y la consolidación de una oposición bielorrusa genuina y una sociedad civil activa políticamente", incluso "en circunstancias muy difíciles y con riesgos personales".
Plassnik señaló que los candidatos de la oposición y sus partidarios han conseguido desarrollar "una alternativa democrática". "Sus esfuerzos merecen nuestro apoyo y reconocimiento", dijo. "No podemos dar la espalda a los ciudadanos de Bielorrusia, no queremos abandonarlos sino trabajar con ellos", insistió por su parte la comisaria de Relaciones Exteriores, Benita Ferrero-Waldner.
"En la Europa de hoy, y de acuerdo con los estándares democráticos, Bielorrusia es una excepción, pero estamos convencidos de que, para la democracia y los demócratas en Bielorrusia, el clima invernal no prevalecerá (...) Estamos convencidos de que algún día Bielorrusia será también parte del sistema europeo de valores", insistió la ministra de Asuntos Exteriores austriaca.
Douste-Blazy valoró además en que es necesario que la UE pacte con Estados Unidos su política de firmeza ante las autoridades bielorrusas y dialogue con Rusia sobre esta cuestión.
Por su parte, el secretario de Estado de Asuntos Europeos, Alberto Navarro, explicó que durante la reunión mantenida por los ministros el debate se vertebró entre quienes mantuvieron una línea más dura y los que promovieron una postura más pragmática que Navarro resumió en "firmeza con el Gobierno y apertura hacia la sociedad civil y las organizaciones democráticas".
Navarro indicó que, cuando se produjeron algunas intervenciones, como la de Alemania, partidaria de no aislar al pueblo bielorruso, él pensó en el caso de Cuba."Obviamente, cuando queremos abrir espacios de libertad, hay que impulsar el diálogo y los contactos con la sociedad civil y la sociedad democrática, siendo conscientes de lo difícil que es eso en un régimen autoritario", relató.
La UE ya ha retirado el visado a siete dirigentes bielorrusos por acontecimientos ocurridos en el pasado, pero entre los líderes afectados por la prohibición no se encuentra Lukashenko. Fuentes comunitarias explicaron que las nuevas sanciones podrían aprobarse en abril o mayo.
RETAHILA DE CONDENAS
También el Parlamento Europeo reclamó "sanciones" contra Bielorrusia. Su presidente, Josep Borrell, indicó que el "no respeto de las normas electorales internacionales, unido al continuo deterioro de la situación política, y a violaciones persistentes de los derechos civiles y fundamentales de la población bielorrusa, no puede quedar sin consecuencias sobre las relaciones entre la UE y Bielorrusia".
La delegación de la Eurocámara encargada de seguir las elecciones explicó en una declaración que Alexander Lukashenko no puede ser reconocido como el presidente legítimo de Bielorrusia, ya que los comicios no fueren libres, equitativos ni democráticos, por lo que habría que celebrarlos de nuevo.
Los parlamentarios pidieron también una extensión de la prohibición de entrada en la UE que ya existe para algunos altos funcionarios bielorrusos, simplificando paralelamente el mecanismo de concesión de visados a los representantes de la sociedad civil.
Borrell opinó que esta elección presidencial se ha visto marcada por "irregularidades, violencia y arrestos arbitrarios". Por ello, invita al Consejo a "tener en cuenta los criterios del Parlamento cuando se estudien las sanciones contra el Gobierno bielorruso".
EEUU VS RUSIA
También el Gobierno estadounidense llamó a la celebración de nuevas elecciones y amenazó con imponer sanciones a Bielorrusia. "Estados Unidos no acepta los resultados de las elecciones", declaró el portavoz de la Casa Blanca, Scott McClellan, aunque dejó claro que Washington seguirá apoyando al pueblo bielorruso.
Muy diferente fue la valoración que hicieron la Comunidad de Estados Independientes (CEI) y Rusia. El secretario general de la CEI, Vladimir Rushailo, calificó los comicios de "abiertos y transparentes", mientras que Moscú elogió su limpieza y legitimidad.
Mientras, el presidente del Consejo de Europa, Terry Davis, calificó de "farsa" los comicios. "En un país en el que la libertad de expresión y de asociación están suprimidas de forma tan agresiva, el voto no es un ejercicio democrático, sino una farsa", denunció Davis en un comunicado del Consejo de Europa.
Finalmente, el secretario general de la OTAN, Jaap de Hoop Scheffer, condenó la forma en que se han desarrollado las elecciones y aseguró que "no han respetado las normas democráticas".
