Endesa no cree estar entre las eléctricas objeto de análisis
BRUSELAS, 16 Feb. (EUROPA PRESS) -
La Comisión Europea investigará a algunas compañías de gas y de electricidad para averiguar si cumplen las normas comunitarias en materia de competencia, después de que un informe sobre el sector de la energía haya revelado que algunas mantienen actitudes destinadas a "proteger su propia posición en el mercado", según anunció hoy la responsable de Competencia, Neelie Kroes.
El Ejecutivo comunitario no quiso identificar ni los países ni las compañías que serán objeto de investigación, pero anunció que empezará por los "casos más graves". "La forma en la que algunos operadores, en particular los históricos, influyen en los precios y en el acceso al mercado puede constituir una infracción a las reglas comunitarias sobre abuso de posición dominante o prohibición de prácticas restrictivas", dijo el portavoz de Competencia, Jonathan Todd.
La comisaria Kroes explicó que se trata de investigar a "aquellos que no se comporten (correctamente), averiguar cuáles son los malos comportamientos y darles nuestro normal tratamiento a estas compañías". "No es un placer, pero somos muy justos en esto y necesitamos un mercado en el que la competencia sea justa", señaló.
Las investigaciones se centrarán en un primer momento en casos específicos de cierre de mercados mediante contratos de larga duración que impiden operar a nuevas empresas, y de restricción en el acceso a las infraestructuras de trasporte y a capacidades de almacenamiento para el gas y la electricidad.
El departamento de Competencia está estudiando tomar medidas en otros tres campos: la fijación de precios en los mercados al por mayor de electricidad, incluyendo las bolsas de energía; las prácticas que impiden a los consumidores cambiar de proveedor, y los vínculos que se establecen en algunos contratos entre el precio del gas y el precio del petróleo.
"Si los suministradores de gas ligan en sus contratos el precio de gas con el del petróleo, los examinaremos de cerca para ver si no hay una infracción en las reglas de competencia de la UE", explicó Jonathan Todd.
Bruselas no descarta que además sea necesario tomar otras medidas en el plano normativo o en materia de competencia para resolver los problemas detectados en el estudio. En primer lugar, considera imprescindible reforzar las obligaciones de transparencia impuestas a los operadores históricos.
Además, a juicio del Ejecutivo comunitario ha quedado demostrado que la protección de los derechos adquiridos de los operadores históricos -es decir, derechos de utilización de capacidades derivados de contratos de monopolios anteriores a la liberalización constituyen un obstáculo a la entrada de nuevas empresas e impiden una competencia efectiva en el sector, por lo que deberían eliminarse.
Bruselas señala además que los regimenes voluntarios de cooperación entre las autoridades reguladoras de los Estados miembros no son suficientes para fomentar la construcción de interconexiones y gaseoductos internacionales, y se plantea tomar acciones en este campo. Finalmente, pide que se refuercen los poderes de las autoridades nacionales y que se obligue a una separación obligatoria entre las actividades de suministro y de gestión de infraestructuras en el caso de los operadores históricos.
SERIOS PROBLEMAS
El informe preliminar del Ejecutivo comunitario sobre la competencia en los mercados del gas y la electricidad pone de manifiesto "serios problemas" en cinco áreas principales. En primer lugar, los mercados de venta al por mayor mantienen el mismo alto nivel de concentración que antes de la liberalización, lo que permite a los operadores históricos aumentar los precios.
Asimismo, los consumidores no tienen la posibilidad de elegir entre varias compañías por la dificultad de que entren al mercado nuevas empresas. El principal obstáculo con el que se encuentran las nuevas sociedades es la separación insuficiente entre las funciones de infraestructura y de suministro. En tercer lugar, no existe competencia transfronteriza por la falta de interconexiones.
El estudio señala que las nuevas empresas no pueden obtener la información necesaria para competir de forma efectiva, y esta falta de transparencia beneficia también a los operadores históricos. Finalmente, denuncia que a menudo los precios no se determinan sobre la base de una competencia efectiva, y muchos consumidores desconfían de la manera en que se fijan las tarifas.
Las partes interesadas tienen ahora dos meses para presentar sus alegaciones a los resultados del informe. "Mientras tanto, iremos en paralelo con el tratamiento antitrust para algunas compañías que se están comportando mal en el mercado", insistió Kroes.
ENDESA NO SE DA POR ALUDIDA
El consejero delegado de Endesa, Rafael Miranda, que participó en la jornada de presentación del informe, aseguró que no cree que la eléctrica esté entre los operadores investigados por la Comisión por prácticas anticompetitivas.
"Nosotros precisamente no", dijo Miranda en relación a la posibilidad de que la Comisión pueda emprender alguna acción contra las empresas que se compruebe que ejercitan su posición dominante u obstaculicen la entrada de nuevos competidores.
"Yo creo que ésta es una reunión muy amplia en la que hay operadores mucho más dominantes que Endesa", dijo Miranda. Por otra parte, también evitó pronunciarse de la posibilidad de que los servicios de Competencia de la Comisión se interesen por las actividades de Gas Natural o de Iberdrola. "No lo sé, no se ha dicho nada y eso es muy confidencial", dijo.
