Crónica Vaticano.- El mundo islámico rechaza con virulencia unas declaraciones del Papa pese a la aclaración vaticana

Actualizado: viernes, 15 septiembre 2006 22:25

La polémica podría hacer peligrar el viaje que Benedicto XVI tenía previsto cumplir a Turquía a finales de noviembre

ROMA, 15 Sep. (EUROPA PRESS) -

Las palabras del Papa Benedicto XVI sobre el Islam y su profeta Mahoma durante un discurso en la Universidad de Ratisbona han provocado una ola de críticas en todo el mundo islámico, llegándose en el caso de Pakistán a convocar al nuncio de la Santa Sede al Ministerio de Exteriores y a aprobar en el Parlamento una resolución condenatoria.

En una visita esta semana a su país natal, Alemania, el Papa citó a un emperador cristiano del siglo XIV que afirmó que el profeta Mahoma sólo había traído violencia al mundo; asimismo, puso en tela de juicio el concepto de 'Yihad' o guerra santa. El portavoz del Vaticano, padre Federico Lombardi, señaló anoche que Benedicto XVI no tenía intención de herir los sentimientos de los creyentes musulmanes, sino dejar claro que rechazaba la violencia motivada por la religión.

Hoy, el presidente del Consejo Pontificio para la Cultura, el cardenal francés Paul Popuard, defendió el discurso del Papa, considerando que "no era un ataque sino una mano tendida, porque reivindica el valor de las culturas religiosas de la Humanidad, entre ellas el Islam", según recogió el diario 'Corriere della Sera'.

Para Popuard, uno de los objetivos del discurso del Pontífice fue la afirmación de "que existe una urgente necesidad de un verdadero diálogo entre las culturas y las religiones".

"La lección que dio el Papa en su antigua universidad estaba dirigida a mostrar que Occidente se equivoca al considerar negativamente la religión y lleva a afirmar que las culturas profundamente religiosas del mundo ven en la exclusión del divino de la universalidad de la razón un ataque a sus convicciones más intimas", explicó el purpurado francés al diario milanés, añadiendo: "¿No le parece que un musulmán sincero se tiene que alegrar por esta afirmación".

Poupard explicó que las palabras del Papa intentaban explicar "la cuestión entre fe y razón y no trataba el Islam". "Además, el Papa no pronuncia ningún tipo de palabra ofensiva pues aclara que estas opiniones eran de un emperador bizantino, en el invierno de 1391", precisó el "ministro de la cultura" de la Santa Sede.

La vorágine surgida en torno a las palabras del Pontífice coincidió con la toma de posesión del cardenal Tarcisio Bertone como nuevo secretario de Estado vaticano, así como con el nombramiento del arzobispo francés nacido en Marruecos, Dominique Mamberti, gran experto en países islámicos, como nuevo secretario para la Relación con los Estados, un cargo que equivale al ministro de Exteriores del Vaticano.

El primero prometió trabajar por la convivencia pacífica de los pueblos. "La comunión profunda que nos une en el deber que compartimos al servicio de la Iglesia y, por tanto, de la dignidad humana y de la convivencia pacífica entre los pueblos, tendrán que traducirse en una colaboración leal y fiel, reforzada por muchos de nosotros por el espíritu sacerdotal y por la caridad pastoral que debe animarnos siempre en nuestras actividades", señaló Bertone.

EL VIAJE A TURQUIA, EN PELIGRO

Mientras algunos medios de comunicación destacaron que esta polémica podría afectar al próximo viaje que el Papa tiene previsto realizar a Turquía el 28, 29 y 30 de noviembre, algunas autoridades islámicas turcas exigieron que Benedicto XVI les pida excusas.

La máxima autoridad religiosa del país, el gran muftí, Ali Bardakoglu, comentó que esperan "las excusas al mundo del Islam por parte de Benedicto XVI" y añadió, en referencia al próximo viaje, que no cree que "venga nada bueno de la visita al mundo musulmán de un hombre con estas ideas sobre el profeta Mahoma".

Por su parte, el nuncio apostólico de Turquía, Antonio Lucibello, en declaraciones a la agencia de la Conferencia Episcopal italiana, SIR, comentó que "son sólo especulaciones" los rumores de una cancelación del viaje del Papa a este país.

Finalmente, el Partido Justicia y Desarrollo (PJD), del primer ministro turco, Recep Tayyip Erdogan, acusó al Papa de intentar revivir el espíritu de las Cruzadas. El vicepresidente del PJD, Salih Kapusuz, sostuvo que las declaraciones del Sumo Pontífice eran "el resultado de una lamentable ignorancia" sobre el Islam y su profeta o una deliberada distorsión de la verdad".

"Tiene una oscura mentalidad que viene de la oscuridad de la Edad Media. Es algo pobre que no ha beneficiado el espíritu de la reforma en el mundo cristiano", aseguró Kapusuz, en declaraciones a la agencia Anatolia. "Parece un esfuerzo para revivir la mentalidad de las Cruzadas", agregó.

PAKISTAN Y TERRITORIOS PALESTINOS

Desde Pakistán, su Ministerio de Asuntos Exteriores convocó al embajador de la Santa Sede para expresarle su pesar. Las palabras del Pontífice fueron "muy inquietantes para los musulmanes de todo el mundo y han provocado un gran daño y angustia", afirmó el Ministerio de Exteriores en un comunicado.

En este sentido, el nuncio del Vaticano en Pakistán "lamentó el daño causado a los musulmanes y argumentó que los medios de comunicación han tergiversado totalmente algunas citas históricas que el Papa utilizó en su lectura".

Esta mañana, el Parlamento paquistaní había condenado al Papa a través de una resolución aprobada por unanimidad, en la que se la acusa de hacer comentarios "despectivos" sobre el Islam y el profeta Mahoma, y se le exige una disculpa por herir los sentimientos de los musulmanes.

La resolución, promovida por el legislador conservador Fazal Karim, fue apoyada tanto por los diputados del partido del Gobierno como por la oposición de la Cámara baja del Congreso paquistaní.

Mientras, el líder de los Hermanos Musulmanes de Egipto, Mohammed Mahdi Akef, consideró que las declaraciones del Papa "han despertado la ira de todo el mundo islámico".

También el primer ministro palestino, Ismail Haniyeh, se sumó a las críticas afirmando que el Papa ha ofendido a los musulmanes de todo el mundo. Haniyeh, que hizo estas declaraciones al término de la oración del viernes en Gaza, adelantó que hoy se organizarán protestas para "expresar la ira palestina hacia los comentarios que han ofendido al Islam y a los musulmanes".

"En nombre del pueblo palestino que vive en la tierra santa palestina, expresamos nuestro rechazo por los comentarios hechos por el Santo Padre sobre el Islam como fe, su ley religiosa, historia y su estilo de vida", apuntó Haniyeh. "Estos comentarios esconden la verdad y dañan su esencia bendecida. Pedimos al Santo Padre que reconsidere su declaración y que deje de ofender a la religión islámica, que tiene 1.500 millones de seguidores", afirmó.

Por otra parte, una pequeña explosión provocó hoy daños menores en el patio de una iglesia ortodoxa griega en la ciudad de Gaza, en un ataque que los responsables de la misma temen sea una represalia por las palabras del Papa. La explosión, ocurrida a primera hora de la mañana, fue provocada por un pequeño artefacto sin que se registraran heridos. Una segunda explosión alcanzó a la iglesia horas después y una granada sonora fue lanzada también cerca de la misma por la tarde, sin provocar daños.

El único apoyo sin fisuras que ha recibido Benedicto XVI fuera del mundo religioso provino de Alemania y de su canciller, Angela Merkel. En su opinión, los críticos han "entendido mal" el mensaje del Pontífice.

"Es una invitación al diálogo entre las religiones y el Papa ha impulsado explícitamente este diálogo, que yo también apruebo y veo como urgentemente necesario. Lo que Benedicto XVI aclara es un rechazo decisivo e inflexible de cualquier uso de la violencia en nombre de la religión", abogó.