MADRID, 15 Abr. (EUROPA PRESS) -
La Policía paquistaní ha detenido este lunes en la localidad de Bhakkar a un hombre que había sido sentenciado previamente por canibalismo por reincidir en su crimen, después de localizar los restos de un niño en su vivienda.
El detenido, identificado como Mohamad Arif, y su hermano Mohamad Farman --que ha logrado escapar--, habían sido condenados previamente por desenterrar los cuerpos de cien personas de varios cementerios para comerse los restos, motivo por el que pasaron dos años en la cárcel.
La Policía ha afirmado que Arif ha reconocido durante el interrogatorio haberse comido parte del cadáver del niño encontrado en su vivienda, del que únicamente quedaba la cabeza, según ha informado el diario paquistaní 'Dawn'.
"Los residentes informaron a la Policía de un fuerte olor proveniente de la vivienda de los dos hermanos. Hicimos una redada y encontramos la cabeza de un niño", ha dicho el jefe de la Policía local, Amir Abdulá, en declaraciones a la agencia británica de noticias Reuters.
"Hemos arrestado a Mohamad Arif y estamos llevando a cabo operaciones para arrestar al otro hermano", ha agregado. La Policía está inspeccionando los cementerios cercanos para ver si hay pruebas de su presencia.
Arif y Farman fueron arrestados por canibalismo por primera vez en 2011 en un caso que atrajo la atención de los medios nacionales e internacionales después de que se encontraran los restos cocinados de una niña en una olla en su vivienda.
Los hermanos fueron liberados el 18 de mayo de 2013 en medio de las críticas de los residentes, tras lo que permanecieron relativamente ocultos durante un periodo de tiempo para evitar posibles represalias.
