BUJUMBURA, 10 Sep. (Reuters/EP) -
La policía de Burundi ha detenido a un hombre de 33 años de edad como presunto responsable del asesinato de tres monjas italianas, que fueron halladas muertas --dos de ellas violadas y parcialmente decapitadas-- en una parroquia al norte de la capital del país, Bujumbura, el pasado fin de semana.
El sospechoso, Christian Butoyi, tenía una piedra manchada de sangre que podría haber sido utilizada como arma durante el ataque y una llave, que la Policía cree que podría haber utilizado para entrar al convento y cometer el crimen. También tenía el teléfono móvil de una de las víctimas.
"Él confesó sin ningún remordimiento que violó a las monjas y las mató después", han afirmado fuentes policiales, que aseguran que el hombre defiende que cometió el crimen "porque, después de llevar a cabo sus propias investigaciones, se dio cuenta de la parroquia fue construida en la propiedad que pertenece a sus padres".
El sospechoso será examinado por los servicios médicos, quienes determinarán si sufre una enfermedad mental.
Según los medios italianos, que citan fuentes de la Policía de Burundi, el agresor es un joven que huyó del convento sin haber robado nada y tras haber apuñalado a dos de las monjas, mientras que la otra fue golpeada con una piedra.
El padre Mario Pulcino, superior de los misioneros saverianos en Burundi definió el múltiple crimen como "un episodio del todo inesperado, un enorme dolor".
