PEKÍN, 30 Abr. (Reuters/EP) -
Guo Yushan, uno de los partidarios del disidente chino Chen Guangcheng, quien se fugó el 22 de abril del arresto domiciliario al que estaba sometido, ha indicado este lunes que el activista ciego espera quedarse en China y hacer campaña por la reforma, y ha advertido de que su familia correría peligro porque las autoridades podrían ajustar cuentas con ellos tras la huida.
Guo ha asegurado que el plan de Chen no es buscar refugio en Estados Unidos ni en otro país. "Desde luego, quiere quedarse en China y demandar reparación por los años de persecución ilegal que sufrió en Shandong, y continuar sus esfuerzos por la sociedad china", ha afirmado.
"La situación es complicada ahora, así que no quiero confirmar dónde se encuentra ahora", ha indicado Guo. "Su propia elección personal ciertamente es no abandonar China", ha ratificado.
Asimismo, ha indicado que no han podido contactar con la esposa de Chen, Yuan Weijing. "Ahora estamos más preocupados por la seguridad de su familia, porque una vez que los oficiales descubrieron que había escapado, van a ajustar cuentas con ellos", ha dicho.
Los partidarios de Chen dicen que ahora está bajo la protección diplomática de Estados Unidos en Beijing, después de fugarse de una detención de 19 meses en su casa rural del poblado de Dongshigu, en la provincia de Shandong, en el este de China.
"La huida de Chen Guangcheng fue un milagro, algo difícil de creer a menos que le escuches a él mismo contar la historia", ha indicado Guo, un investigador y defensor de derechos residente en Pekín, que ha hecho campaña para Chen y le ayudó a llegar a la capital china después de su fuga.
"Tuvo que pasar por encima de ocho muros y más de una docena de barreras por sí mismo, tropezar y caer cientos de veces durante 19 horas hasta que cruzó un arroyo y, finalmente, se escapó de su pueblo", ha dicho Guo durante su primera entrevista tras días de interrogatorio policial, después de que se hizo público el escape de Chen.
También ha contado que el cuerpo del disidente sufrió rasguños y golpes mientras escapaba el 22 de abril pasado. "Su pie derecho tuvo un esguince que apenas le permitía estar de pie", ha comentado Guo. "Al final, sólo pudo arrastrarse por un tramo largo, así que cuando lo vi estaba en un estado realmente lamentable", ha agregado.
A través de un vídeo publicado en Internet el viernes pasado, Chen denunció el trato brutal que recibieron él y su familia mientras estuvo confinado. Ahora, las autoridades estadounidenses y las chinas están negociando una solución para él, según han contado amigos y simpatizantes del activista.
Chen fue liberado en 2010 tras permanecer cuatro años en la cárcel por denunciar prácticas ilegales llevadas a cabo por las autoridades regionales en el marco de la política del hijo único, como abortos forzosos y un programa de esterilizaciones. Desde septiembre de 2010, permencía en arresto domiciliario de facto al no poder abandonar su casa por la presencia de fuerzas de seguridad alrededor de la misma.
