WASHINGTON, 4 Jun. (EUROPA PRESS) -
Estados Unidos ha asegurado que trabajará con el nuevo presidente electo de Egipto, Abdelfatá al Sisi, para avanzar en la asociación estratégica e intereses compartidos por los dos países y ha informado de que el presidente estadounidense, Barack Obama, tiene la intención de hablar con el nuevo mandatario egipcio durante los próximos días.
En comunicado de la Casa Blanca, Estados Unidos ha señalado que los observadores internacionales han considerado en sus primeras evaluaciones que la Comisión Electoral Presidencial de Egipto (PEC) ha administrado el proceso de forma "profesional y acorde a la legislación egipcia". Además, el Gobierno norteamericano ha mostrado su satisfacción por que se haya permitido la presencia de observadores internacionales y por que los comicios "se hayan realizado de forma pacífica".
De todos modos, Estados Unidos ha incidido en su preocupación por "el ambiente de restricción política en el que han tenido lugar las elecciones y por las limitaciones a la libertad de expresión, reunión pacífica y asociación que se dan en el país". El Ejecutivo estadounidense ha pedido al Gobierno egipcio que "tome medidas" para garantizar el cumplimiento de estas libertades, así como el "derecho a un debido proceso" de todos los egipcios. También ha instado a las autoridades egipcias a adoptar las reformas que permitan un mayor control y cumplimiento de responsabilidades en el desempeño de sus funciones.
Asimismo, Washington ha instado a las autoridades egipcias a considerar las recomendaciones de los grupos observadores de cara a las elecciones parlamentarias que tendrán lugar a finales de año, así como para "mejorar la administración de futuros procesos". En el comunicado, el Gobierno de Estados Unidos ha señalado que los comicios "son un componente integral de las sociedades democráticas, que se fundamentan en el cumplimiento de la ley, de los derechos civiles y en un discurso político abierto".
Para terminar, Estados Unidos ha recordado que los ciudadanos de Egipto han pedido de forma clara "mayor dignidad, justicia y oportunidades políticas y económicas", por lo que la Administración norteamericana ha insistido en su apoyo a las aspiraciones democráticas de los egipcios y ha asegurado que "permanecerá a su lado porque persiguen el futuro que se merecen".
