BISHKEK, 14 Abr. (Reuters/EP) -
Un destacado diplomático estadounidense llegó este miércoles a Kirguistán para entrevistarse con los dirigentes del Gobierno provisional que derrocaron a comienzos de abril al Gobierno de Kurmanbek Bakiyev y hablar del futuro de la base aérea que Estados Unidos tiene en el país, que usa para abastecer a sus tropas en Afganistán.
La embajada de Estados Unidos en Kirguistán confirmó que un alto dirigente del Departamento de Estado, Robert Blake, se reunirá hoy con la líder del Gobierno provisional kirguís, la ex ministra de Asuntos Exteriores Rosa Otunbayeva.
Se espera que el futuro de la base aérea de Manas, situada en el norte del país y por la que Estados Unidos paga un alquiler al estado kirguís, sea el tema principal de las conversaciones entre los dos dirigentes, sobre todo después de que la semana pasada un miembro del Ejecutivo de Otunbayeva sugiriera que podrían acortar en el tiempo el permiso del Ejército estadounidense para operar en Kirguistán.
La situación parece aún más complicada para Estados Unidos después de que el actual Gobierno provisional ya haya manifestado su simpatía por Rusia, al que llegaron a calificar de "país hermano" y cuyo primer ministro, Vladimir Putin, ya ha prometido a Kirguistán toda la ayuda que necesite.
Esto se debe a que Rusia, que aún considera que Asia Central es su área de influencia, como han destacado en repetidas ocasiones sus dirigentes políticos, ya ha presionado anteriormente a Bishkek para que expulse a los militares estadounidenses de su territorio.
