JERUSALÉN, 6 Ene. (EUROPA PRESS) -
La cifra de víctimas mortales causadas por el Ejército israelí en la Franja de Gaza no cesa de aumentar y, cuando se cumple el cuarto día de ofensiva terrestre, fuentes del Gobierno 'de facto' calculan en 120 el número de fallecidos, entre los cuales se encuentran al menos 35 niños y 18 mujeres. En total, las muertes superan ampliamente el medio centenar y hay más de 2.500 heridos.
Las fuentes consultadas por el diario israelí 'Haaretz' señalaron que los milicianos de Hamás han preferido ocultarse en zonas densamente pobladas, lo que ha provocado que gran parte de las muertes se registren entre los civiles. Como consecuencia, las fuerzas hebreas continúan los combates en lugares habitados y provocan casos como los registrados ayer, cuando dos familias palestinas murieron.
Así, Hamás prefiere el uso de francotiradores y emboscadas contra los militares. No obstante, fuentes israelíes explicaron a la cadena británica 'Sky News' que ya han capturado a unos 80 milicianos de Hamás, mientras ambas partes libran intensos enfrentamientos en la Ciudad de Gaza y sus alrededores.
Los bombardeos provocaron durante la noche la muerte de cinco palestinos en la ciudad central de Deir al Balah, indicaron fuentes médicas. El incidente estuvo provocado por los disparos de un tanque israelí, un tipo de maquinaria que también originó por error el fallecimiento de tres militares hebreos.
Al parecer el suceso tuvo lugar después de que el tanque disparase contra un edificio supuestamente abandonado en la localidad de Jabalya, ubicada a cuatro kilómetros al norte de la Ciudad de Gaza, apuntó un portavoz de las fuerzas hebreas. Como consecuencia de estos disparos, parte del edificio se vino abajo y provocó daños entre las personas que se encontraban en las inmediaciones.
