BOGOTÁ, 3 Ago. (EUROPA PRESS) -
La guerrilla colombiana del Ejército de Liberación Nacional (ELN) ha secuestrado a cuatro uniformados --tres policías y un militar-- y a dos civiles en una zona rural del departamento de Chocó, en la costa pacífica, a pesar del diálogo de paz que protagoniza en La Habana con el Gobierno, según han denunciado el Ejército y la Policía en un comunicado.
Los hechos ocurrieron el jueves por la tarde en las inmediaciones del corregimiento de Tagachí, en el municipio de Quibdó. "Hombres armado que vestían prendas de uso privativo de las Fuerzas Militares" capturaron a los cuatro uniformados y a dos contratistas civiles "con conocimiento en el mantenimiento de equipos de comunicaciones".
Los policías "venían de la zona rural de Vidrí, donde habían recogido material logístico", un viaje que habían aprovechado para trasladar al soldado, "que estaba siendo evacuado (...) porque padece una enfermedad tropical que tiene que ser tratada con urgencia en un centro asistencial de primer nivel".
"Las informaciones preliminares indican que integrantes del Frente de Guerra Occidental del ELN serían los autores de este secuestro", han afirmado los dos cuerpos de seguridad. "Con esta acción criminal", han subrayado, "el ELN demuestra una vez más el irrespeto permanente a los Derechos Humanos y las normas del Derecho Internacional Humanitario".
Ejército y Policía han exigido al grupo armado la "inmediata liberación" de los rehenes. Hasta entonces, han anunciado que "tienen desplegadas todas sus capacidades en esa zona con el fin de lograr la liberación de las seis personas sanas y salvas".
El secuestro se produce justo la misma semana que la guerrilla y el Gobierno han cerrado el sexto ciclo de las conversaciones de paz, en el que han intentado sin éxito pactar una nueva tregua bilateral para facilitar el avance de las negociaciones.
El diálogo de paz entre el ELN y la Casa de Nariño comenzó en febrero de 2017 y desde entonces apenas se han producido progresos. El mayor logro fue el alto el fuego bilateral que estuvo vigente entre el 1 de octubre y el 9 de enero, al que siguió una ola de atentados que obligó a suspender las conversaciones.
