El Ejército yemení lanza una ofensiva contra una tribu

Actualizado: domingo, 2 diciembre 2012 20:48


SANÁ, 2 Dic. (Reuters/EP) -

El Ejército yemení ha lanzado este domingo una ofensiva contra la tribu sospechosa de los últimos ataques contra el principal oleoducto del país y las líneas eléctricas, según han informado las autoridades.

Alrededor de 30 carros de combate y otros vehículos blindados han participado en la ofensiva contra las milicias tribales del área de Wadi Obaida en la provincia de Maarib, principal productora de petróleo del país.

"El Ejército está bombardeando el área en la que se encuentran los hombres armados que atacan el oleoducto y las líneas eléctricas de Maarib", ha declarado una fuente de las fuerzas de seguridad, que ha añadido que algunas casas han sido destruidas.

Este domingo, hombres armados han atacado una central eléctrica en el área de Damashqa, en Maarib, y la han dejado fuera de servicio. Estas tribus armadas estarían saboteando las infraestructuras para presionar al Gobierno a fin de obtener una compensación económica o la liberación de presos.

"Quienes llevan a cabo los ataques son particulares, pero buscan protección y refugio en sus tribus", ha explicado un ministro del Gobierno yemení en declaraciones a Reuters. "Suelen exigir una compensación económica o la liberación de algún familiar encarcelado por delitos", ha añadido.

Las autoridades yemeníes han indicado que el Gobierno del expresidente Alí Abdulá Salé pagaba mensualmente a los miembros de las diferentes tribus para que se abstuvieran de atacar los oleoductos y las líneas eléctricas. Al llegar al poder, el presidente, Abd-Rabu Mansur Hadi, continuó con los pagos, pero los interrumpió poco tiempo después.

Yemen ha estado luchando para restaurar la normalidad después de que el presidente Hadi fuera elegido en febrero tras un año de protestas que forzaron a Salé a renunciar a su cargo después de 33 años en el poder.

Restaurar la estabilidad en el país es una prioridad para Estados Unidos y sus aliados del golfo Pérsico debido a la cercanía de Yemen con el mayor exportador de petróleo, Arabia Saudí, a sus rutas de navegación y porque es el hogar de una de las principales ramas de Al Qaeda.

Sin embargo, grupos armados han atacado de forma repetida las infraestructuras gubernamentales, especialmente los oleoductos y las instalaciones eléctricas. El último ataque tuvo lugar el sábado, media hora después de que un grupo de ingenieros finalizara las reparaciones de al menos tres fugas en el oleoducto que transporta crudo desde Maarib hasta las instalaciones de Ras Isa, en el mar Rojo.

Las tribus también han atacado repetidamente el gasoducto de Yemen, el único a través del cual se suministra al país de gas natural licuado y que suponen la principal fuente de ingresos del Estado, por lo que el Gobierno se ha visto obligado a desplegar a sus tropas para protegerlo.