MADRID, 1 Ago. (EUROPA PRESS) -
El presidente de Turquía, Recep Tayyip Erdogan, ha asegurado este miércoles que los terroristas del Partido de los Trabajadores del Kurdistán (PKK) "pagarán" por la muerte de una mujer y su bebé a causa de la explosión de una bomba en la provincia de Hakkari, en el sureste del país.
Nurcan Karakaya, esposa de un soldado, y su bebé de once meses murieron el martes por una bomba de carretera que se activó con el coche en el que viajaban por el distrito de Yuksekova. La mujer falleció en el acto mientras que el pequeño lo hizo horas después en el hospital.
"Pagarán por esta masacre", ha dicho Erdogan en el funeral, según informa la agencia de noticias oficial, Anatolia. "La lucha contra el terrorismo seguirá hasta el último terrorista (...) Nadie tiene derecho a perturbar la paz de este país", ha subrayado.
Además, el jefe de Estado ha aprovechado el momento para reiterar que, si el Parlamento da el visto bueno, restaurará la pena de muerte en Turquía, a pesar de las advertencias internacionales.
