MADRID, 16 Dic. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno español no apoyará ninguna solución para el contencioso del Sáhara Occidental que no cuente a la vez con el "consentimiento" de Marruecos y el Frente Polisario, ha señalado este martes el ministro de Asuntos Exteriores y de Cooperación, José Manuel García-Margallo.
En la sesión de control al Ejecutivo en el Senado, el jefe de la diplomacia española ha contestado una pregunta del senador de Amaiur Urko Aiartza sobre las iniciativas que España piensa defender para intentar desbloquear el contencioso a partir del año próximo, cuando se siente como miembro no permanente en el Consejo de Seguridad de la ONU.
"España viene apoyando una solución política justa, duradera y mutuamente aceptable que prevea la libre determinación del pueblo del Sáhara Occidental en el marco de los principios y propósitos de la Carta de Naciones Unidas", ha resumido el ministro, precisando que todos los elementos de esta posición son "igualmente importantes".
NO CABEN SOLUCIONES UNILATERALES
Esto quiere decir, ha añadido, que la solución ha de ser, en primer lugar, política. "Es decir, no podrá ser militar ni impuesta por la fuerza", ha aclarado. En segundo lugar, debe ser mutuamente aceptable, por lo que se excluyen "soluciones decididas unilateralmente o impuestas sin el consentimiento de las dos partes, Marruecos y el Frente Polisario", ha añadido.
Y tres, la solución "debe prever la libre determinación del pueblo del Sáhara en el marco de la legalidad internacional, encarnada y representada por Naciones Unidas", ha indicado.
El ministro ha subrayado que el compromiso del Gobierno con el Sáhara Occidental se ve reflejado en tres actuaciones: el apoyo a los esfuerzos del secretario general de Naciones Unidas y de su enviado personal al Sáhara, Christopher Ross; los intentos de búsqueda del consenso en el Grupo de Amigos del Sáhara (España, EEUU, China, Rusia, Reino Unido y Francia) y el mantenimiento de la ayuda bilateral hacia los campamentos saharauis de Tinduf que sitúan a España como su principal donante a pesar de los recortes.
Horas antes, en el Congreso de los Diputados, el ministro había dejado claro que su posición sobre el Sáhara Occidental es "distinta" a la que defiende el Real Instituto Elcano, que ha apostado por la fórmula de una amplia autonomía pero dentro de la soberanía marroquí frente a la creación de un nuevo Estado poblado solo por unos centenares de miles de habitantes susceptibles de radicalización por otros habitantes llegados del Sahel.
