MADRID, 16 Nov. (EUROPA PRESS) -
Decenas de parlamentarios europeos y nacionales se reunieron hoy en el Congreso de los Diputados español para analizar los 20 años desde el ingreso de España en la Unión Europea en 1986, en una jornada presidida por el actual presidente del Congreso, Manuel Marín, el del Senado, Javier Rojo, así como el actual presidente del Parlamento Europeo, Josep Borrell, entre otros muchos.
El actual presidente del PE, Borrell, destacó que "estos 20 años han sido los más transformadores" para España, y subrayó el hecho de que España "ha aprovechado muy bien su entrada en la Unión Europea" y, por ende, su ingreso "es la historia de un éxito". "España es hoy una institución más viva, conocida de lo que era hace 20 años", añadió.
"El país ha cambiado mucho y nosotros con él", explicó el presidente del PE, y aclaró que "la transformación no ha sido sólo física", sino también, incidió "ha cambiado su psicología, su forma de entender el mundo". Pero "Europa también ha cambiado", en palabras del Borrell, porque "ahora es un proyecto político" y, tras conseguir "la búsqueda de la paz", el primer objetivo de la Comunidad Europea, embrión de lo que hoy es la UE, según Borrell, ahora toca evaluar "qué pueden y deben hacer juntos los europeos".
No obstante, Borrell aseguró que también los españoles han "aportado y mucho" a la consolidación del proyecto europeo y además resaltó que los españoles son "los más europeístas de los europeos", con el 70 por ciento de aceptación, muy por encima, destacó, de países como Finlandia, que en la actualidad ejerce la presidencia de turno de la UE.
A pesar de los logros españoles desde su ingreso en la UE, Borrell criticó la falta de participación de los españoles en el debate político europeo en temas como la recién debatida Directiva de Servicios y la "convulsión" que provoca la posible adhesión de Turquía en la UE. "Somos acríticos", lamentó el presidente del PE, e insistió en que en España "Turquía está ausente del debate profundo".
Por ello, animó a España a jugar "un papel más activo" dentro de la UE, y no sólo por parte de los políticos, sino también alentó a la "sociedad" española a implicarse en "cómo salir del impás constitucional" en el que se encuentra la UE tras los noes de Francia y Holanda al Tratado Constitucional europeo, así como a los parlamentarios nacionales y europeos a superar "la desconfianza" entre el debate parlamentario en el seno del PE y los debates en los parlamentos nacionales.
Por su parte, el presidente del Congreso, Manuel Marín resaltó que la entrada de España en la UE constituyó "una de las operaciones más exitosas de las relaciones internacionales" para el país, clave para su "modernización", y en este sentido, resaltó que hoy en día "España empieza a ser un país rico", con un crecimiento "que ha sido casi una constante" en estos 20 años del Producto Interior Bruto en torno al 1 por ciento, y además adelantó que éste "alcanzará al de Canadá próximamente". Asimismo, resaltó la renta per cápita de la Comunidad de Madrid que, en la actualidad, se sitúa en los 27.000 euros por habitante.
Respecto a los canales de comunicación, Marín tachó de "falso" el argumento de que "no nos llega la información de Bruselas", ya que, insistió, "todo se sabe en cuestión de horas". En este sentido, lamentó que "Parlamentos nacionales pro-europeístas hay muy pocos", mientras que, por su parte, "las capacidades de bloqueo son enormes" en el seno de la UE.
Por este motivo, Marín apuntó a la idea de "crear auténticos consorcios en áreas de interés" entre determinados países de la UE o, por el contrario, resolver "el problema del concepto de lo que es la integración europea". Al hilo de su argumentó, destacó que en España, en la actualidad, "se están creando necesidades que no se responden ni en el plano nacional ni en el europeo", que simplificó en terrorismo e inmigración. "El problema actual de nuestra sociedad es Frontex", subrayó.
Por su parte, el presidente del Senado español, Javier Rojo, tras destacar "los 40 años oscuros" de dictadura española que explican por qué España "no llegó a tiempo en la construcción europea", subrayó que, sin embargo, "nadie ha ido más rápido en la defensa de Europa" como España.
Asimismo, subrayó que los valores europeos de igualdad e integración política, además de legalidad, bilateralismo y cooperación, explican que en Europa haya "el menor índice de pobreza del mundo", "la mejor distribución entre los que tienen y no tienen", "la mejor expectativa de vida", "el menor índice de criminalidad" y preste "la mayor ayuda al desarrollo".
Rojo abordó dos problemas actuales en la UE, la inmigración y el abastecimiento energético básico "para el futuro de nuestro crecimiento". Así, pidió "un enfoque global" y "una política común" europea, para atajar el problema de la inmigración, y abogó por el "diálogo continuo con África" y "no sólo un mayor control de fronteras". En este sentido, justificó que miles de subsaharianos vienen "dispuestos a jugarse la vida por un futuro en Europa" porque "aspiran a tener lo que ven en la televisión".
Respecto al consumo energético, el presidente del Senado instó a tomar "medidas de contención" en el consumo de gas y petróleo porque, incidió "la dependencia resulta significativa" y, así, apostó por "incluir más fuentes renovables en nuestra dieta energética".
