MADRID, 8 Sep. (EUROPA PRESS) -
El secretario de Estado para la UE, Diego López Garrido, presentó hoy las líneas generales de la próxima presidencia española de la UE de 2010, que se centrará en lograr que la UE tenga una voz propia en la escena internacional, en la lucha contra la pobreza y en impulsar el liderazgo del bloque europeo ante el desafío energético y el cambio climático.
López Garrido destacó además en un discurso pronunciado en el marco de la V Conferencia de Embajadores que se celebra esta semana en Madrid que España buscará, junto a Hungría y Bélgica, también copresidentes de la UE en 2010, consolidar una Europa más segura para los ciudadanos, más cercana y con más igualdad.
La de 2010, cuarta presidencia española de la UE, también destaca por la necesidad de desarrollar una estrecha colaboración con unas instituciones europeas renovadas --el Parlamento y la Comisión tendrán una nueva composición en 2009-- y por la posible entrada en vigor del Tratado de Lisboa antes o durante la presidencia. Si finalmente sale adelante, el Tratado de Lisboa supone un nuevo esquema institucional.
En el ámbito de la Política Exterior y de Seguridad Común (PESC) y del desarrollo de la Política Europea de Seguridad y Defensa (PESD), López Garrido destacó cómo se ha apoyado el aumento de la presencia europea en el mundo. Desde diciembre de 2003, la UE ha desplegado 21 misiones PESD.
López Garrido declaró ante los embajadores que "La Unión Europea está redoblando sus esfuerzos para desempeñar el papel que le corresponde, acorde con nuestro potencial comercial y económico y la política exterior española está contribuyendo a aumentar esa presencia y credibilidad en el mundo".
Durante su intervención, López Garrido también desarrolló los detalles de la nueva organización de la Secretaría de Estado para la Unión Europea, que consolida y amplía sus competencias. La Secretaría incorpora dos nuevas Subdirecciones Generales (Países de la UE y Países Candidatos y Políticas de Vecindad) y estrena la nueva dependencia funcional del Director General de Política Exterior como Director Político.
