MADRID, 25 Ene. (EUROPA PRESS) -
El exdiplomático estadounidense Bill Richardson ha dimitido este miércoles de su cargo en un comité internacional que aconseja a Birmania en el marco de la crisis de los rohingya en el estado de Rajine (oeste), criticando duramente a la líder 'de facto' del país, Aung San Suu Kyi.
"Parece que el comité se va a convertir probablemente en un equipo de animación de las políticas del gobierno, en contra de proponer cambios políticos genuinos muy necesarios para garantizar la paz, la estabilidad y el desarrollo en el estado de Rajine", ha dicho.
Richardson, quien fuera embajador estadounidense ante la ONU y secretario de Energía durante la Administración de Bill Clinton, ha afirmado además que Suu Kyi carece de "autoridad moral", según ha informado la emisora estadounidense Voice of America.
El anuncio de su dimisión ha llegado días después de la primera visita del comité al estado de Rajine y, según ha desvelado, tras una discusión entre él y Suu Kyi debido a su mención del caso de los dos periodistas de la agencia británica de noticias Reuters detenidos en el país.
Los dos periodistas, Wa Lone, de 31 años, y Kyaw Soe Oo, de 27, fueron arrestados después de que fueran invitados a cenar con miembros de la Policía en las afueras de Rangún y desde entonces permanecen bajo custodia. También fueron arrestados un capitán y un sargento de la Policía.
El 10 de enero, un tribunal de Birmania aceptó la petición de la Fiscalía de imputar bajo la Ley de Secretos Oficiales de 1923, provocando nuevas críticas por parte de la comunidad internacional y numerosas organizaciones no gubernamentales.
Los periodistas de Reuters están en Birmania para cubrir la crisis de los rohingya. Más de 400 han muerto y más de 600.000 han huido a Bangladesh a causa de la operación militar puesta en marcha por el Gobierno contra esta minoría en represalia por un ataque perpetrado el pasado 25 de agosto por insurgentes rohingya contra las fuerzas de seguridad.
Richardson ha asegurado que la líder birmana le dijo que el asunto no es competencia del comité, agregando que la disputa continuó en una cena que celebraron posteriormente. Las autoridades birmanas no se han pronunciado por el momento.
"Ha desarrollado arrogancia en el poder", ha manifestado, en declaraciones al diario estadounidense 'The New York Times'. "La conozco desde hace mucho y le tengo cariño, pero básicamente no quiere escuchar malas noticias, y no quiero ser parte de un encubrimiento", ha argumentado.
En este sentido, ha subrayado que uno de sus objetivos al empezar a participar en el comité "era ser útil e intentar alcanzar soluciones políticas reales y a largo plazo". "Descubrí que el comité está siendo usado como un equipo de animación para el Gobierno", ha insistido.
Richardson ha criticado especialmente al presidente del comité, el tailandés Surakiart Sathirathai, afirmando que "busca evitar los problemas reales ante el riesgo de hacer frente a los anfitriones birmanos".
Naciones Unidas ha advertido de que la actuación de las fuerzas birmanas contra los rohingya puede interpretarse como una "limpieza étnica". El lunes, el Alto Comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Zeid Raad al Hussein, dijo no descartar que la líder birmana, Aung San Suu Kyi, pueda ser acusada de genocidio.
