Expertos demandan una UE con "más apetito de poder" ante el "choque tectónico" entre EEUU y China

Banderas de Estados Unidos y China
Banderas de Estados Unidos y China - GETTY IMAGES / FENG LI - Archivo
Publicado: miércoles, 26 febrero 2020 15:03

Advierten de que el coronavirus podría acelerar la carrera entre EEUU y China

MADRID, 26 Feb. (EUROPA PRESS) -

La Unión Europea debe tener "más apetito de poder" en un contexto global cambiante debido a la lucha de poder entre Estados Unidos y China, un auténtico "choque tectónico" que está teniendo efectos en las relaciones internacionales y en la economía mundial y que ahora tiene ingredientes adicionales como la crisis del coronavirus, según han planteado un grupo de expertos en un coloquio celebrado este miércoles en Madrid.

"Las tensiones entre Estados Unidos y China están provocando un choque tectónico en el orden mundial", ha afirmado Carla P. Freeman, profesora de la John Hopkins School of Advanced International Studies (SAIS), en un foro sobre 'Las nuevas dinámicas de poder entre China, Estados Unidos y la UE' organizado por la Fundación Consejo España-China y Fundación Consejo España-Estados Unidos con el apoyo de Uría Menéndez.

Freeman ha estimado que es "algo irónico" porque "la alianza entre Estados Unidos y China fue lo que realmente galvanizó la globalización (...) generando una tremenda prosperidad" en todo el mundo, si bien los muchos beneficios que ha obtenido Pekín de ello son percibidos por Washington como "una amenaza" a sus intereses.

Jinghan Zeng, profesor de China y Estudios Internacionales de la Universidad de Lancaster, ha añadido que China tampoco está satisfecha con el orden mundial, subrayando que no es el único país, de ahí el surgimiento de los BRICS --Brasil, Rusia, India, China y Sudáfrica--, por lo que ha considerado "natural" que "busquen su propia voz", "un mayor liderazgo".

El nuevo director general de Política Exterior y de Seguridad del Ministerio de Exteriores, Fidel Sendagorta, ha coincidido con los otros dos ponentes en que el pulso entre Washington y Pekín es "un factor determinante" para la conformación del nuevo orden mundial, dado que "cada país a la hora de jugar sus cartas mira a su relación con Estados Unidos y a su relación con China". Antes eran compatibles, pero "ahora es un lado u otro", lo que hace "las cosas más complicadas".

Sendagorta ha indicado que "la UE no está cómoda" en esta coyuntura porque "la filosofía detrás de la integración europea es un orden mundial en el que hay reglas y, si el poder es la nueva moneda de las relaciones internacionales, entonces el Derecho Internacional y sus reglas pierden valor". Por eso, ha señalado, "se habla mucho en Bruselas (...) de que la UE debe aprender a hablar el lenguaje del poder, debe tener apetito de poder", si quiere sobrevivir en "un mundo de depredadores".

El diplomático español ha admitido que no es un reto sencillo porque, en su opinión, la UE no debe perder en ningún momento su "alma multilateral", valorando en este sentido los acuerdos de libre comercio que el bloque comunitario está cerrando.

No obstante, Sendagorta ha sido claro al rechazar que la UE mantenga una posición neutral. "Siempre hemos tenido una afinidad natural con Estados Unidos en ámbitos como los valores y la seguridad", ha recordado aduciendo que, si bien se puede "cooperar estrechamente" con China, por ejemplo, en lo relativo al libre comercio, no así en estas dos cuestiones.

TERRENOS DE JUEGO

Los expertos han coincidido en que las consecuencias de la "competición" entre estos dos países son difíciles de prever porque se libra en muchos ámbitos.

En el aspecto ideológico, Zeng ha destacado que "ya no hay un enfrentamiento entre capitalismo y comunismo" porque China hace tiempo que dejó de ser una potencia comunista para abrazar "el socialismo con características chinas" que ha acuñado Xi Jinping.

En este sentido, Freeman ha matizado que, aunque es cierto que el gigante asiático ha cambiado mucho, también ha empezado a usar su "poder económico" para "promover sus valores políticos, no solo en casa, sino en todo el mundo".

Sendagorta ha destacado igualmente que mientras hace apenas una década las "democracias liberales eran también los países que mejor comportamiento económico tenían", se ha producido un "gran cambio" por el cual esta prosperidad se ha trasladado a "países que no son democracias liberales", de las cuales China es un buen ejemplo, lo que hace que otros países tengan la "tentación" de imitar este segundo modelo.

Frente a ello, las "democracias liberales" deberían "despertar" y centrarse en seguir perfeccionando sus sistemas político y económico, de modo que "sean más justos con sus propios ciudadanos" --"Los próximos conflictos tendrán un gran componente de guerra civil"-- y que "sean capaces de llegar con su ejemplo" a los demás actores internacionales. "Debemos tomárnoslo en serio", ha instado.

Otro de los escenarios planteados por los expertos ha sido el tecnológico, por la resistencia de Estados Unidos a que las empresas chinas sean quienes implementen la red 5G en aliados clave como los estados miembro de la UE y Reino Unido. En opinión de Zeng, esto es una prueba más de que Washington "no acepta ser desafiado", por lo que ha reaccionado intentando "excluir" a Pekín del mercado, "lo cual es muy injusto".

"Ni Estados Unidos ni China quieren ser el 'número dos'" en innovación tecnológica porque una brecha de esta naturaleza pude abocar al segundo a verse absolutamente "sobrepasado" por el primero con implicaciones tanto económicas como de seguridad, ha comentado Sendagorta. Con ello, ha augurado que ambos van a estar "crecientemente obsesionados" con no perder su posición de liderazgo.

CRISIS DEL CORONAVIRUS

Interrogados acerca del impacto que la crisis del coronavirus podría tener en la rivalidad entre Estados Unidos y China, Freeman ha considerado que puede acelerar lo que es "un proceso en desarrollo" porque objetivamente puede cambiar el comportamiento de empresas, por ejemplo en lo tocante a sus redes de suministro de bienes, y porque "está siendo usado por los gobiernos estadounidense y chino para hacer política".

Zeng, por su parte, ha reconocido que "la economía china está sufriendo mucho por el coronavirus" lo cual "está cambiando la competición". No obstante, ha estimado que el impacto económico que esta crisis de salud pública pueda tener en China dependerá de cómo lo gestione y lo resuelva. Algunos analistas económicos, ha comentado Freeman, "prevén un crecimiento negativo".

En opinión de la profesora estadounidense, el brote de coronavirus, que tiene su epicentro en la ciudad china de Wuhan y se ha extendido por todo el mundo, tiene también una vertiente positiva en este contexto de lucha entre dos grandes potencias. "Es un ejemplo de que vivimos en un mundo global y de que debemos trabajar juntos" para afrontar los desafíos comunes, ha defendido.

Sendagorta también ha querido ver una consecuencia positiva de toda esta incertidumbre internacional. En el plano europeo, ha indicado que, "cuando pasemos la fase del divorcio" entre Reino Unido y la UE, el hecho de tener que elegir entre Estados Unidos y China en temas como el 5G "va a acercar a Reino Unido a la UE en los asuntos que comparten", tales como el acuerdo nuclear con Irán o la ciberseguridad.

Además, ha estimado que, más alla de las rivalidades entre países, a medio y largo plazo se va a necesitar "un sano diálogo" en asuntos de trascendencia internacional como el control de armas, la inteligencia artificial o el Espacio. "Tenemos que llegar a acuerdos sobre el uso de esas tecnologías aunque sean acuerdos limitados", ha reclamado.

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