Fallece un menor que se encontraba en coma tras resultar herido durante las protestas de 2013 en Estambul

Actualizado: miércoles, 12 marzo 2014 1:41

MADRID, 12 Mar. (EUROPA PRESS) -

Berkin Elvan, el joven de catorce años de edad que se encontraba en coma desde junio de 2013 tras recibir el impacto en la cabeza de un bote de gases lacrimógenos durante las protestas de ese año contra un proyecto urbanístico en el parque Gezi de la localidad turca de Estambul, ha fallecido este martes, según ha informado su familia.

"A nuestra gente: Hemos perdido a nuestro hijo Berkin Elvan a las 7.00 horas. Condolencias a todos", han dicho los padres del adolescente, que cumplió 15 años en enero, a través de un mensaje en la red social Twitter.

El joven, que se ha convertido en el octavo fallecido en el marco de las protestas, resultó herido cuando iba a comprar pan en el barrio de Okmeydani y se convirtió en un símbolo de las denuncias de la oposición contra la brutalidad de las fuerzas de seguridad durante la represión de las manifestaciones.

Decenas de personas se han concentrado frente al hospital en el que permaneció ingresado Elvan durante su convalecencia para mostrar su solidaridad a la familia, según ha informado el diario turco 'Hurriyet'.

La concentración ha vivido momentos de tensión y los agentes han vuelto a utilizar gases lacrimógenos contra los presentes, a pesar de que la entrada principal del hospital estaba cerca, hiriendo a dos personas.

Uno de los heridos es un hombre que había acudido al centro médico a visitar a su mujer hospitalizada y que ha recibido el impacto en la cabeza de un bote de gases lacrimógenos. El otro herido es un niño que ha sido alcanzado por otro de dichos botes.

La parlamentaria del opositor Partido Republicano del Pueblo (CHP) Melda Onur, que estaba participando en la vigilia, ha denunciado que la Policía "ha usado una vez más una fuerza desproporcionada" y ha detallado que "los gases lacrimógenos han llegado a afectar el interior del hospital".

Los padres del fallecido se han unido posteriormente a los presentes, y la madre, Gulsum Elvan, ha afirmado que "no ha sido Dios el que se ha llevado a Elvan, ha sido (el primer ministro, Recep) Tayyip Erdogan".

Erdogan ha aplaudido en numerosas ocasiones a la Policía por sus "heroicas acciones" durante las manifestaciones en Gezi, a pesar del alto número de fallecidos y heridos provocados por la represión.

La familia de Elvan ha criticado reiteradamente a las autoridades por proteger a los responsables del incidente y ha anunciado que comenzará un proceso legal ante el Tribunal Europeo de Derechos Humanos (TEDH) ante la ausencia de una investigación en el país. Los agentes responsables de la operación que ha costado la vida al joven siguen en activo.

El primer alto cargo del Gobierno en pronunciarse tras la muerte de Elvan ha sido el presidente, Abdulá Gul, quien ha expresado sus condolencias a través de un breve mensaje. "Sólo tenía catorce años cuando ocurrió el incidente. Comparto el pesar de la familia", ha dicho.

OLEADA DE PROTESTAS

Las protestas se han sucedido en distintos puntos del país tras el anuncio de la muerte de Elvan. En Ankara, las manifestaciones han comenzado después de que una persona se sentara con una rebanada de pan y un cartel con el texto 'Soy Berkin' en el barrio de Kizilay. Posteriormente, más personas se han unido a ella sentándose en silencio en el parque Guven.

Protestas similares han tenido lugar en Estambul, Antalya e Izmir, mientras que estudiantes de varias universidades han boicoteados sus clases. Asimismo, tenderos del barrio estambulita de Okmeydani, donde vive la familia del fallecido, han cerrado sus tiendas como muestra de apoyo.

La Policía ha respondido nuevamente con cañones de agua y gases lacrimógenos para dispersar las muestras de apoyo en Ankara y Estambul, donde han rechazado las peticiones de los manifestantes de leer un comunicado en la céntrica plaza Taksim. En esta localidad han sido detenidas por el momento 45 personas.

En la provincia de Tunceli (este), cientos de personas han marchado hacia la sede provincial del Partido Justicia y Desarrollo (AKP), mientras que alrededor de mil personas se han concentrado en Samsun (norte) coreando 'Tayyip (Erdogan), asesino'.

Las protestas se han extendido igualmente a Adana, Trabzon, Diyarbakir, Denizli, Eskisehir, Sakarya, Mersin, Zonguldak, Usak, Giresun, Bolu, Konya, Tekirdag, Edirne, Çanakkale, Çesme y Mugla --donde ha habido otros 22 detenidos--, según han informado los medios turcos. Además, se han registrado concentraciones en varias ciudades extranjeras, entre ellas París, Berlín, Londres, Estocolmo y Rotterdam.

Por el momento no se han publicado balances oficiales de heridos durante la intervención de la Policía, si bien el diario 'Hurriyet' ha indicado que dos mujeres han sido atropelladas por un camión policial con cañón de agua en Mersin, donde al menos once personas han sido detenidas. Una de ellas ha sido hospitalizada en estado grave tras sufrir un traumatismo craneoencefálico.

HRW PIDE UNA INVESTIGACIÓN

Por su parte, la organización no gubernamental Human Rights Watch (HRW) ha solicitado a las autoridades que abran una investigación en torno al incidente que provocó la muerte de Elvan y ha recordado que "no se ha abierto ningún proceso de este tipo contra la Policía en estos nueve meses".

"Existe la necesidad urgente de identificar a los agentes que utilizaron lanzaderas de botes lacrimógenos para determinar quién disparó contra Berkin y examinar el incidente en términos de la cadena de comando para depurar responsabilidades", ha dicho.

HRW, que ha denunciado la impunidad existente en torno al incidente, ha recalcado que la muerte de Elvan es un ejemplo de la "brutalidad" de los agentes durante la represión de las manifestaciones.

"La violencia policial contra los manifestantes es un problema endémico en Turquía, donde existe una cultura de impunidad. Berkin Elvan, el joven que cayó a un coma y nunca despertó, se ha convertido en un símbolo del historial de violencia policial y la ausencia de responsabilidades. Berkin y su familia merecen justicia", ha manifestado la organización.

Por último, ha recordado que documentó durante las protestas en Gezi la existencia de heridos con traumatismos craneoencefálicos o pérdida de visión a causa del disparo de botes de gases lacrimógenos desde distancias cortas contra los manifestantes.