NUEVA YORK, 25 Sep. (EUROPA PRESS) -
Al menos cinco soldados estadounidenses han perdido la vida en tres ataques registrados ayer en el sur de Afganistán, según informó hoy el Ejército norteamericano, mientras una nueva encuesta refleja que un 41 por ciento de los estadounidenses aboga por la retirada del país asiático, mostrando un descenso significativo del apoyo prestado inicialmente a la estrategia del presidente Barack Obama el pasado mes de febrero.
De los soldados fallecidos, tres de ellos murieron por la explosión de una bomba de carretera al paso de su patrulla por la provincia de Zabul. Dos soldados fallecieron en el acto, mientras que el tercero moría minutos después a causa de las heridas provocadas por la explosión.
Los otros dos soldados fallecieron en sendos ataques insurgentes, según el comunicado del Ejército estadounidense, que no precisó más detalles.
Estos ataques se insertan dentro de la escalada de violencia talibán contra las tropas internacionales en el país asiático, que ahora son más de 100.000, dos tercios de las cuales son estadounidenses y a la espera de recibir un contingente adicional de 17.000 soldados a petición del comandante de las fuerzas de Estados Unidos en Afganistán, el general Stanley McCrystal.
En este sentido, la última encuesta de Gallup, publicada hoy por el diario 'USA Today', señala que un 48 por ciento de los estadounidenses y seis de cada diez demócratas encuestados se oponen al incremento de tropas. Este dato supone un descenso en el apoyo a Obama de 15 puntos en relación a la misma encuesta realizada el pasado mes de febrero.
Es más, un 41 por ciento del total de los encuestados y un 53 por ciento de los votantes demócratas a los que se les ha realizado el sondeo piden la retirada de las tropas estadounidenses en Afganistán. Sólo un siete por ciento del total de los encuestados desea que se mantenga el número actual de efectivos. Otro 41 por ciento de los estadounidenses, no obstante, se muestra favorable al aumento de efectivos.
El pasado mes de febrero, recién inaugurada la Presidencia de Obama, el número total de partidarios del incremento de tropas llegaba al 65 por ciento.
