PARIS, 16 Mar. (del corresponsal de EUROPA PRESS Salvador Martínez) -
A las 18:00 horas de hoy se cerró el plazo para que los aspirantes a la jefatura del Estado francés presentasen ante el Consejo Constitucional francés las al menos 500 firmas necesarias para ser oficialmente candidato a las elecciones presidenciales que se celebrarán en abril y mayo.
El Consejo Constitucional es el organismo que vela porque la colecta de firmas se desarrolle con normalidad y el que, tras mirar con lupa los dosieres de apoyo con las firmas presentados por aspirantes y alcaldes, anunciará en la tarde del próximo lunes la lista definitiva de candidatos a las elecciones presidenciales. No obstante, en principio se cree que serán 12 las personalidades políticas que pretenden ganarse el voto de los franceses en la primera vuelta de los comicios.
La recogida de las cinco centenas de rúbricas es un mero trámite para los aspirantes a la jefatura del Estado que cuentan tras de sí con un partido político presente en el Parlamento. Este es el caso de Nicolás Sarkozy, ministro francés del Interior y candidato del partido gubernamental Unión por un Movimiento Popular, de Ségolène Royal, aspirante del Partido Socialista Francés, François Bayrou, candidato de la Unión por la Democracia Francesa y Marie-George Buffet, aspirante del Partido Comunista Francés.
Sin embargo, los otros ocho candidatos han tenido que movilizar a todos sus militantes para persuadir a los alcaldes y obtener así unas firmas difícil de obtener porque los dirigentes de los consistorios franceses están a menudo presionados por los partidos presentes en la Asamblea Nacional y en el Senado para que no se solidaricen con los 'pequeños candidatos', conocidos así por los medios de comunicación franceses en alusión al escaso porcentaje de intención de voto con el que cuentan según los sondeos.
La falta de solidaridad y las presiones de los grandes partidos fueron denunciadas esta tarde en la Asamblea Nacional por Nicolas Dupont Aignan, miembro del UMP hasta el pasado mes de enero, momento en el que decidió formar su propio partido para reivindicar las posiciones políticas del General de Gaulle.
República en pie, el nombre de la formación que lo defendía como candidato, no obtuvo los 500 apoyos necesarios, un fenómeno que Dupont Aignan achacó a la ingerencia de otros partidos. "Se ha hecho todo lo posible para no presentar a los franceses una visión libre diferente, original", dijo. "Por primera vez después de la formación de la quinta República no habrá un candidato 'gaullista' en la elección presidencial", añadió.
