PARÍS, 1 Ene. (EP/AP) -
La Unión por el Movimiento Popular (UMP), en el poder, se prepara para comenzar mañana sus elecciones primarias, que se llevarán a cabo por primera vez en una campaña presidencial a través de internet.
Las primarias de la conservadora UMP no tendrán mucho suspenso pues hay un solo candidato en la papeleta virtual: el actual ministro del Interior, Nicolás Sarkozy. Por lo tanto, los resultados de la votación, que se prolongará durante 10 días, ya son conocidos.
De todas maneras, los dirigentes de la UMP esperan que la primaria 'online', en la que pueden participar los 330.000 miembros de la agrupación, representará una ruptura con las tradicionales convenciones políticas y dará al partido un aura de modernidad.
La UMP no es el único partido que convierte a internet en un elemento clave de su campaña previo a las dos rondas presidenciales que se celebrarán en Francia en abril y en mayo. Tanto los socialistas, de oposición, como el ultraderechista Frente Nacional, liderado por Jean-Marie Le Pen, han utilizado internet para atraer votantes y ampliar la lista de afiliados.
La candidata socialista Segolene Royal ha hecho de su portal de acceso en internet un elemento clave de su campaña basada en la llamada "democracia participativa". En su portal, se invita a los usuarios a participar en una serie de foros y debates online. Royal, una ex ministra, aprovechó esta herramienta para ir diseñando su plataforma, que divulgó capítulo tras capítulo en su sitio en internet.
Este uso de la red benefició a Royal, que obtuvo una aplastante victoria sobre sus dos rivales masculinos en las primarias socialistas de noviembre.
Internet también desempeñó un importante papel en los debates de la UMP previos a las primarias, y que Sarkozy y otros posibles candidatos respondieron a preguntas de usuarios en la red. Los otros aspirantes a la candidatura presidencial posteriormente abandonaron la puja, dejando a Sarkozy como único abanderado de su partido.
Recientes encuestas de opinión muestran a Royal y a Sarkozy muy cercanos en apoyo popular, mientras Le Pen, que estremeció a Francia al llegar a la segunda ronda en los comicios presidenciales de 2002, aparece en tercer lugar.
