PARIS, 10 Abr. (EUROPA PRESS) -
El primer ministro francés, Dominique de Villepin, reiteró hoy, durante un programa en la cadena pública de televisión 'TF1', no tiene "ambición presidencial" y estimó que el fracaso del Contrato Primer Empleo (CPE) ha sido "una prueba en un tiempo extremadamente difícil".
Asimismo afirmó que no quiere desanimarse pese a la crisis generada por el CPE, que ha levantado protestas entre los colectivos de estudiantes y trabajadores durante varias semanas, así como disturbios en las principales ciudades de Francia.
Villepin reafirmó que pese al fracaso de la reforma que ha defendido hasta el final, "no dará su brazo a torcer" en lo que se refiere a la lucha contra el paro juvenil. "Queremos aportar soluciones para los problemas que afectan a los que tienen más dificultades", afirmó. "Esta situación no se solucionará con un golpe de varita mágica", zanjó.
Al ser preguntado por la sustitución del Contrato de Primer Empleo por una nueva propuesta de ley, el primer ministro aseguró que el presidente, Jaques Chirac, así como el Gobierno han llegado a la conclusión de que "la situación está bloqueada". "Ante una situación de bloqueo, la primera responsabilidad del Gobierno es buscar una salida", declaró, y eso "es lo que hemos hecho hoy".
Además, Villepin aseguró que la inquietud de la gente superó a la propuesta que el Gobierno quiso dar para atajar el empleo. " La respuesta que quise aportar era una respuesta bien dirigida y muy directa", afirmó el primer ministro, "pero las inquietudes fueron más fuertes que la proposición que habíamos hecho", y comparó la situación creada por el CPE con el rechazo a la Constitución Europea por parte de la ciudadanía francesa, pese a que el Ejecutivo la apoyaba. "El CPE se convirtió en símbolo de la precariedad, pese a que iba a proporcionar miles de empleos", continuó Villepin.
