TEHERÁN, 13 Abr. (Reuters/EP) -
El Ministerio de Interior iraní confirmó que la explosión en la mezquita de Shohada, en Shiraz, se debió a un accidente y no a un ataque intencionado, como señalaron algunas fuentes policiales inmediatamente después del suceso que por el momento se ha cobrado la vida de 10 personas y ha provocado heridas a más de 160.
"La explosión de la pasada noche en Shiraz (capital de la provincia de Fars), fue consecuencia de un accidente y no de la colocación de una bomba", declaró, sin dar más detalles, el viceministro de Interior en materia de Seguridad Nacional, Abbas Mohtaj, en comentarios recogidos por la agencia oficial iraní IRNA.
Lo que en un primer momento fuentes policiales consideraron como un atentado causado por un explosivo casero, fue posteriormente desmentido posteriormente por el comandante de las fuerzas de seguridad de la provincia de Fars, Alí Moayedi, que informó de que la explosión fue originada por la detonación de unos explosivos que sobraron de "un pasado desfile en conmemoración" de la guerra Irán-Irak (1980-1988).
Los comentarios de este agente fueron recogidos tanto por la cadena Press TV como por la agencia de noticias semioficial FARS. En este medio, Moayedi añadió que, según "las evaluaciones iniciales", la explosión de la noche del sábado "ni fue intencionada, ni se trató de un sabotaje".
Sin embargo, el portavoz del Ministerio de Exteriores, Alí Hoseini, mantuvo esta mañana que, "según las últimas noticias, la Policía todavía no ha alcanzado una postura oficial" respecto a la explosión, por lo que "nadie puede prejuzgar absolutamente nada sobre el incidente".
La detonación tuvo lugar mientras uno de los clérigos de la mezquita se dirigía a los más de 800 fieles que se encontraban allí en el momento de la explosión.
