BAGDAD, 10 May. (Reuters/EP) -
El Gobierno iraquí anunció hoy una tregua entre las fuerzas de seguridad y la milicia del Movimiento Sadr, liderado por el clérigo chií Muqtada al Sadr, que pondrá fin a semanas de enfrentamientos en el barrio bagdadí de Ciudad Sadr, bastión del grupo antiestadounidense.
"El primer ministro, Nuri al Maliki, ha dado su aprobación al acuerdo", explicó el portavoz del Gobierno, Ali al Dabbagh, confirmando así las informaciones previas que citaban a responsables del Movimiento Sadr. "El Gobierno iraquí pide a todas las partes que se comprometan con este acuerdo, que muestren serenidad y contención", prosiguió Al Dabbagh.
En cualquier caso, la vigencia del alto el fuego deberá comprobarse sobre el terreno, puesto que se desconoce el nivel de control que tiene la dirección del Movimiento sobre el Ejército del Mahdi, su brazo armado. Además, el Ejército estadounidense asegura que no ha sido informado de acuerdo alguno.
"Se ha logrado un acuerdo entre el bloque Sadr y la Alianza Unida Iraquí (AUI) para un alto el fuego. El principal objetivo del acuerdo es resolver la crisis en Ciudad Sadr", explicó un portavoz de Al Sadr, Salah al Ubaidi, en declaraciones a Reuters. "El Gobierno ha aceptado el acuerdo", agregó. La AUI es el grupo con más diputados del Parlamento y el principal partido de la coalición gubernamental.
El portavoz indicó que el acuerdo de alto el fuego, que consta de diez puntos, entrará en vigor a partir del sábado por la noche o el domingo.
"El principal objetivo del acuerdo es solventar la crisis de Ciudad Sadr", indicó Al Ubaidi. Cuatro días después de la entrada en vigor del alto el fuego las fuerzas de seguridad gubernamentales podrán entrar en el barrio y detener a quien quieran siempre que tengan una orden de arresto, explicó el portavoz del grupo de Al Sadr.
El acuerdo prevé, además, el envío de ayuda para los ciudadanos del barrio y la reapertura de los controles que aíslan ahora la zona.
De confirmarse, este alto el fuego supondría el final de semanas de enfrentamientos en el barrio bagdadí de Ciudad Sadr, bastión del Movimiento Sadr, en los que habrían muerto varios cientos de personas y convertido a los dos millones de habitantes de la zona en rehenes de los combates.
