MADRID, 28 Ene. (EUROPA PRESS) -
El primer ministro de República Centroafricana (RCA), Simplice-Mathieu Sarandji, se ha sumado este lunes al llamamiento a levantar el embargo de armas que pesa contra el país que han hecho miles de centroafricanos que han marchado por las calles de Bangui.
Varias decenas de miles de personas ha marchado este lunes por Bangui para converger en el monumento de los Mártires reclamando el fin del embargo de armas que pesa contra el país desde 2013, después de que los rebeldes de Séléka, una alianza integrada principalmente por musulmanes, se hicieran con el poder desencadenando una guerra civil con los grupos de autodefensa, popularmente conocidos como 'antibalaka' e integrados mayoritariamente por cristianos.
Según informa la emisora Radio Ndeke Luka, los manifestantes han entregado al primer ministro un memorándum con su exigencia destinado al Consejo de Seguridad de la ONU, Francia, China, Rusia, Estados Unidos y Guinea Ecuatorial, país este último miembro rotatorio del máximo organismo. Está previsto que el Consejo de Seguridad discuta este jueves si se mantiene el embargo.
"Las fuerzas de defensa y seguridad se ven privadas de armas mientras que los grupos armados tienen exceso de armas", ha denunciado Sarandji ante los manifestantes.
"El humanismo que caracteriza a la comunidad internacional debe llevarla a prestar atención al grito del pueblo centroafricano, que necesita ser protegido por las fuerzas de seguridad", ha sostenido el primer ministro, lamentando que "hay un problema, una barrera que debe levantarse: el embargo que afecta a las fuerzas centroafricanas".
Así las cosas, según la citada emisora, Sarandji ha prometido trasladar la petición de los manifestantes a sus destinatarios. "Para los que no tienen representación en Bangui, el Ministerio de Exteriores hará el resto", ha aclarado, en medio de los aplausos de los congregados, algunos de los cuales han llegado de fuera de la capital.
La petición del levantamiento del embargo se produce coincidiendo con las históricas conversaciones que desde el jueves pasado están manteniendo el Gobierno y catorce grupos armados en Jartum bajo los auspicios de la Unión Africana y con apoyo de la ONU.
SIGUEN LAS CONVERSACIONES EN JARTUM
Según ha resaltado el comisario de Paz y Seguridad de la UA, Smail Chergui, el Gobierno y los grupos armados siguen implicados en discusiones francas, cordiales y constructivas sobre el futuro de su país". "Todos están de acuerdo en el imperativo de la paz y la necesidad de reconstruir juntos", ha añadido en su Twitter.
"Son unas conversaciones de paz históricas", reconoció a Europa Press desde Jartum el portavoz de la Misión de Estabilización de la ONU en RCA (MINUSCA), Vladimir Monteiro, el jueves pasado en el arranque de las conversaciones, ya que "por primera vez los catorce grupos armados reconocidos se reúnen con el Gobierno".
El encuentro se enmarca en la iniciativa de la UA para acabar con el conflicto que comenzó a finales de 2013 y que enfrenta al Gobierno, a los antiguos rebeldes Séléka --principalmente musulmanes-- y las milicias de autodefensa 'antibalaka' --predominantemente cristianas--.
"La idea es avanzar hacia un acuerdo de paz", indicó Monteiro, y para ello, antes de esta reunión, que se prolongará durante dos semanas, se ha llevado a cabo mucho trabajo preparatorio, incluido un encuentro el pasado verano con los grupos armados para "escuchar qué es lo que realmente quieren y cuyas propuestas fueron trasladadas al presidente del país", Faustin Archange Touadéra.
Sin embargo, según informa este lunes Radio Ndeke Luka, en el borrador de acuerdo de paz de 37 páginas que se ha trasladado a las partes no se incluye la amnistía ni la creación de un gobierno de unidad para salir de la crisis, dos de las principales reivindicaciones de los grupos armados.
