MOSCÚ, 5 Dic. (EUROPA PRESS) -
El Gobierno ruso se desvinculó ayer, a través de una nota del ministerio de Asuntos Exteriores, de un reciente ciberataque perpetrado contra las redes de ordenadores del Pentágono que, según sospechan los funcionarios de Defensa, podría haber provenido del antiguo enemigo durante la Guerra Fría.
Sin embargo, Moscú calificó de infundadas e irressponsables las insinuaciones de los medios de comunicación norteamericanos, según informaciones de la agencia rusa Ria Novosti. Además, el Ejecutivo se desmarcó de otros ataques similares perpetrados contra Estonia y Georgia.
El ataque de los 'hackers' produjo una preocupación insólita entre los comandantes, que incluso informaron a finales del mes pasado de esta incursión cibernética al presidente estadounidense, George W. Bush, informó 'Los Angeles Times'. No obstante, las fuentes del pentágono consultadas no detallaron el alcance del ataque ni sus posibles consecuencias.
