ATENAS, 9 Ene. (Reuters/EP) -
Los gobiernos de Grecia y Macedonia han acordado este martes relanzar sus esfuerzos para tratar de resolver sus disputas políticas por la denominación formal de este último país, en un nuevo acercamiento que podría en última instancia allanar el camino macedonio a la Unión Europea.
Macedonia proclamó su independencia en 1991 y, entre los problemas que surgieron con el país vecino, se ha enquistado el de la nomenclatura oficial del país. En un acuerdo suscrito en 1995, Grecia aceptó como medida provisional la denominación de 'Antigua República Yugoslava de Macedonia', a la espera de una resolución definitiva de la disputa que aún se resiste.
Atenas ha bloqueado los intentos de su vecino del norte de unirse a la OTAN y a la UE esgrimiendo que en el nombre de Macedonia subyace una supuesta reivindicación territorial de la parte norte de Grecia.
"Nos hemos comprometido a encontrar una solución en seis meses", ha anunciado el viceprimer ministro macedonio responsable de asuntos europeos, Bujar Osmani. En este sentido, ha defendido que, con 2018, llega "una oportunidad de oro para progresar en la integración euroatlántica".
Osmani, que ha realizado una visita oficial a Atenas, ha dicho confirmar en la "sinceridad" y el "compromiso" de la otra parte, si bien se han convocado este mes movilizaciones en la parte septentrional de Grecia para protestar contra cualquier acercamiento que implique el uso de Macedonia como nombre.
Por su parte, el portavoz del Gobierno griego, Dimitris Tzanakopoulos, ha afirmado que intentarán "crear las condiciones para lograr el máximo consenso posible" de cara a resolver un "problema" que ha afectado a toda la región durante el último cuarto de siglo.
