MADRID, 18 (EUROPA PRESS)
Irán publica un vídeo en el que se ve el momento de la interceptación del 'Riah'
La Guardia Revolucionaria de Irán ha interceptado un petrolero extranjero en el golfo Pérsico por presunto contrabando, según ha informado este jueves la prensa oficial.
La fuerza de élite ha indicado en un comunicado que el incidente tuvo lugar el domingo, cuando su fuerza naval patrullaba por el golfo Pérsico en el marco de una operación contra el contrabando de combustible y "sorprendió" al petrolero extranjero.
El buque en cuestión estaba al sur de la isla de Larak, cerca del estrecho de Ormuz, con un millón de litros de petróleo que habría recogido de barcos iraníes y se disponía a descargarlo en otros extranjeros en aguas más lejanas.
La Guardia Revolucionaria ha asegurado que antes de actuar recabó la autorización judicial pertinente para abordar e interceptar el petrolero extranjero, con doce tripulantes a bordo.
Además, la fuerza iraní ha aprovechado para aclarar que, en contra de lo que han publicado algunos medios occidentales, no ha interceptado un segundo barco extranjero.
El portavoz del Ministerio de Exteriores iraní dijo el martes que la Guardia Revolucionaria había asistido a un petrolero extranjero en el golfo Pérsico que había emitido una señal de socorro.
"Las unidades navales en la zona seguirán realizando las operaciones de seguridad destinadas a combatir los esfuerzos organizados de contrabando de combustible", ha aseverado.
Durante la jornada, ha publicado además un vídeo en el que se puede ver el momento de la interceptación del barco 'Riah', del que se desconoce la nacionalidad por el momento, según la cadena de televisión iraní Press TV.
Asimismo, el ministro de Exteriores de Irán, Mohamad Yavad Zarif, ha recalcado que no se trata de un petrolero. "Hacemos esto (inspeccionar barcos) todos los días. Es gente que lleva a cabo contrabando con nuestro petróleo", ha agregado.
EL INCIDENTE DEL 'GRACE 1'
El pasado 4 de julio, un destacamento de los Marines británicos apresó el superpetrolero 'Grace 1', contratado por Irán, cuando navegaba cerca de Gibraltar ante la sospecha de que trasladaba un cargamento de crudo con destino a una refinería de Siria, lo que supondría un incumplimiento de las sanciones impuestas por la Unión Europea contra el Gobierno que preside Bashar al Assad.
Desde entonces, el 'Grace 1' permanece bajo custodia de las autoridades británicas en Gibraltar. La República Islámica ha pedido insistentemente a Reino Unido la liberación del superpetrolero y ha advertido de que adoptará represalias contra los británicos y los estadounidenses por esta acción.
Aunque de momento se desconoce si ambos incidentes están relacionados, un portavoz de Downing Street ha indicado que el buque no es de bandera británica. "No somos conscientes de que haya intereses británicos en este buque", ha señalado, según Reuters.
Por su parte, el Departamento de Estado ha condenado "firmemente" la interceptación del buque y ha hablado de "acoso continuado" por parte de la Armada de la Guardia Revolucionaria iraní.
Así, ha sostenido que estas acciones "suponen una interferencia en el tráfico seguro en el estrecho de Ormuz". "Irán debe poner fin a esta actividad ilícita y liberar inmediatamente el buque interceptado y a su personal", ha remachado.
Estos incidentes se enmarcan en la escalada de tensión en el Golfo con motivo del primer aniversario de la retirada de Estados Unidos del acuerdo nuclear. Irán ha comenzado a incumplir gradualmente los compromisos adquiridos en este tratado internacional, volviendo al enriquecimiento de uranio, aunque lejos de los niveles necesarios para fabricar un arma atómica.
