Irak.- Unos 5.000 iraquíes se manifiestan en Ciudad Sadr contra la construcción del muro en una enclave suní en Bagdad

Actualizado: jueves, 26 abril 2007 1:07

BAGDAD, 25 Abr. (EP/AP) -

Cerca de 5.000 iraquíes se manifestaron esta tarde en la ciudad bagdadí de Sadr para mostrar su repulsa a la construcción de un muro alrededor de la ciudad de mayoría suní de Azamiyah, en la capital.

Entre cánticos de "no a la división" y con pancartas que leían "la construcción del muro en Bagdad es el comienzo de la división en Bagdad", los manifestantes denunciaron la construcción por parte de soldados estadounidenses de un muro de 12 metros de altura a lo largo de cinco kilómetros en dicho enclave de mayoría suní.

La concentración en ciudad Sadr, bastión del clérigo disidente chií Muqtada al Sadr, se produce después de que éste, al frente de la milicia el Ejército del Mahdi, condenara la construcción del muro en Azamiyah, e hizo un llamamiento a sus simpatizantes para salir a la calle a protestar por lo que califica de signo de la "voluntad maligna" de los estadounidenses "ocupantes", en referencia al muro.

En un comunicado, Al Sadr asegura que las protestas de la comunidad suní contra la construcción del muro muestran que los iraquíes rechazan "el muro sectario, racista e injusto que busca dividir" a la población iraquí. "Estoy convencido de que esas voces honorables tirarán abajo el muro", aseguró.

"Este muro muestra la voluntad maligna del ocupante y sus proyectos sectarios y terroristas contra nuestra población", denunció el clérigo chií. "Nosotros, la población de Irak defenderemos Azamiyah y otros barrios que vosotros (estadounidenses) queréis segregar de nosotros. Permaneceremos hombro con hombro con vosotros (suníes) para manifestarnos y proteger nuestra tierra santa", añadió.

Las declaraciones, leídas por un asesor suyo a partir de un comunicado del clérigo, son las primeras hechas públicas desde que la semana pasada el Ejército estadounidense anunciara la construcción de un muro de hormigón rodeando la ciudad de Azamiya, de mayoría suní, y que ha sido diana frecuente de ataques con mortero y cohetes por parte de milicias chiíes.

Por su parte, Al Maliki, antes de partir de Kuwait rumbo a Omán, ordenó "el cese de la construcción del muro" y aseguró que a su regreso a Irak "tomará una decisión".

En este sentido, el portavoz del Ejército iraquí, Qassim al Moussawi, explicó que se erigiría algún tipo de barrera o mecanismo de separación en la localidad bagdadí de Azamiyah.

Mientras, el embajador estadounidense en Irak, Ryan Crocker, tras conocerse las declaraciones de Al Maliki, defendió la construcción del muro, por constituir, dijo, un esfuerzo para proteger a la comunidad suní en zonas de mayoría chií y no, resaltó para segregar ambas comunidades.

No obstante, incidó que se podrían revisar las medidas de seguridad impulsadas, tras recordar que éstas fueron puestas en marcha en coordinación con el Ejecutivo iraquí. "Obviamente, respetaremos los deseos del Gobierno y del primer ministro (iraquíes)", aseguró, sin poder precisar cuándo se procedería a la detención de las obras de construcción.