Irak.- Aprobado el plan de reubicación de árabes desplazados a Kirkuk durante el mandato de Sadam Husein

Actualizado: sábado, 31 marzo 2007 22:08

BAGDAD, 31 Mar. (EP/AP) -

Uno de los asuntos más complejos y polémicos que ha tenido que afrontar el Gobierno de Irak ha sido la aprobación del plan de reubicación de miles de árabes que fueron trasladados en la década de 1980 a la ciudad de Kirkuk, en el norte del país, como parte de un plan de 'arabización' concebido por el régimen de Sadam Husein para desplazar a los kurdos.

Mientras, al menos 32 personas murieron hoy en una serie de atentados y combates registrados en varias partes del país. El ataque más importante fue perpetrado precisamente en Kirkuk, donde milicianos abrieron fuego contra un autobús de transporte de trabajadores y mató a nueve de ellos.

Los políticos de la oposición criticaron con dureza este plan de reubicación y Turquía se unió estas voces por su miedo a que Kirkuk entre a formar parte de la región autónoma kurda y envalentone así las aspiraciones independentistas de los kurdos, incluidos los que viven dentro del estado turco.

La Constitución iraquí establece el final de 2007 como fecha límite para la celebración de un referéndum sobre el futuro de Kirkuk y miles de kurdos que vivían en la ciudad han vuelto a ella ante el fin de la amenaza del régimen suní de Sadam Husein. Por eso, ahora se estima que los kurdos son ya mayoría en la ciudad, por lo que el referéndum sería claramente favorable a su inclusión en la zona autónoma.

Kirkuk es una ciudad que perteneció al Imperio Otomano que tiene importantes minorías turca, cristiana, árabes chiíes y suníes, armenios y asirios, pero los kurdos son la etnia mayoritaria.

Además, se teme la acción de la insurgencia suní, decididamente contraria a la autonomía kurda, que ya se ha saldado con varios ataques y atentados. El pasado 19 de marzo una cadena de bombas se cobró la vida de 26 personas.

El ministro de Justicia, Hashim al Shebli, explicó que el pasado jueves el Consejo de Ministros aprobó las recomendaciones de un grupo de estudio supervisado por el propio Al Shebli que establece que los árabes trasladados a Kirkuk desde otras partes del país tras el 14 de julio de 1968 deberían ser devueltos a sus localidades originales e indemnizados con 20 millones de dinares iraquíes (más de 11.200 euros), además de entregarles tierras en sus antiguos hogares.

Sin embargo, este traslado sería voluntario. "No habrá coerción y la decisión no será aplicada por la fuerza", declaró Al Shebli a AP.

Al Shebli también confirmó que presentó su dimisión al Gobierno alegando diferencias irreconciliables con el Ejecutivo y su propio partido político, la Lista Iraquí, un partido árabe suní laico.

El ministro afirmó que presentó su renuncia el pasado jueves, pero que aún está esperando a que sea aceptada. "Tengo diferencias con el Gobierno, por un lado, y con mi bloque parlamentario, por otro", afirmó Al Shebli en declaraciones realizadas por teléfono a AP.

Al Shebli no quiso, sin embargo, explicar en qué consistían estas diferencias, pero es de dominio público su oposición a la decisión del plan de reubicación de los árabes de Kirkuk. Al Shebli aseguró que ejercerá como ministro de Justicia a la espera de la respuesta del Consejo de Ministros.

El portavoz del Gobierno, Alí al Dabbagh, aseguró, por su parte, que el ministro de Justicia dimitió porque sabía que su nombre estaba entre los que estaba previsto que resultaran afectados por una futura crisis de Gobierno.

"Ciertamente, el Gobierno respeta el deseo de Al Shebli y sus razones privadas, por lo que aceptará su dimisión", afirmó Al Dabbagh en declaraciones a la televisión Al Arabiya.