WASHINGTON, 11 Jun. (Reuters/EP) -
Estados Unidos ofrece a Irak "cualquier asistencia adecuada" para combatir al Estado Islámico de Irak y Siria (ISIS), que controla ya las ciudades de Faluya, Mosul y Tikrit, según ha informado la portavoz del Departamento de Estado, Jen Psaki.
Interrogada en la rueda de prensa diaria si Estados Unidos está considerando ayudar a las autoridades iraquíes, ha recordado que Washington ya está ayudando a Bagdad, por lo que se ha limitado a acelerar los envíos de equipos militares y a intensificar la capacitación de su tropas.
"Estamos trabajando con los líderes iraquíes de todo el país para ayudar a coordinar la respuesta y podéis esperar que proporcionemos ayuda adicional para combatir la amenaza del ISIS", ha dicho la portavoz gubernamental.
Por otro lado, Psaki ha aclarado que, de acuerdo con la información que maneja Estados Unidos, la refinería de Baiji, la principal del país, ubicada en los alrededores de Tikrit, "sigue bajo control del Gobierno de Irak".
Sobre los rumores que apuntan a que el ISIS podría estar marchando hacia Bagdad, ha afirmado que no tienen confirmación alguna. "La situación es muy fluida sobre el terreno. Estamos, por supuesto, muy preocupados por el deterioro de la situación, pero no tengo confirmación de esos hechos", ha indicado.
REHENES TURCOS
Por otro lado, Psaki se ha referido a los 80 ciudadanos turcos que están retenidos por el ISIS en dos puntos de Mosul. Del total, 49 fueron capturados en un ataque contra el Consulado General y 31 son camioneros que fueron apresados en una gasolinera.
Psaki ha revelado que el secretario de Estado, John Kerry, ha hablado por teléfono con el ministro de Exteriores de Turquía, Ahmet Davutoglu, y con las autoridades iraquíes sobre el ataque del ISIS contra el Consulado General de Turquía en Mosul.
"Estamos en contacto con los gobiernos de Turquía e Irak y estamos preparados para proporcionar cualquier asistencia que resulte adecuada", ha apuntado.
Davutoglu, por su parte, ha advertido de que, aunque ahora su Gobierno "está inmerso en una calmada gestión de la crisis, esto no debería malinterpretarse". Cualquier daño a nuestros ciudadanos recibiría la más dura de las respuestas", ha dicho desde Nueva York.
