BAGDAD, 6 Ago. (EP/AP) -
De las 53 víctimas mortales contabilizadas hoy en Irak, un total de 19 niños fallecieron en el atentado suicida con camión bomba perpetrado contra una concurrida zona residencial de mayoría chií de la ciudad de Tal Afar, situada en el noroeste de Irak, y que causó la muerte de 28 personas y heridas a otras 40.
La fuerte explosión causó el derrumbe de casas mientras muchas familias se preparaban para pasar el día fuera. Por ello, las autoridades han advertido de que el balance de víctimas podría aumentar. "Los equipos de rescate están todavía buscando entre los escombros", explicó Ali Abbo, presidente del Comité de Derechos Humanos.
El atentado fue cometido con un camión de basura cargado de explosivos y cubierto por una fina capa de materiales de construcción. Dentro de la hora en que se produjo el atentado, las autoridades impusieron el toque de queda en toda la ciudad.
Por otro lado, fuentes policiales iraquíes informaron del hallazgo de 60 cadáveres, en estado de descomposición, en una zona de mayoría suní, bajo presunto control de Al Qaeda en Irak y ubicada al oeste de Baquba, en la provincia de Diyala, en el norte de Irak.
Entre ellos, se incluyen los cadáveres de cinco soldados que sufrieron una emboscada por parte de hombres armados mientras volvían a sus hogares después de haber salido por la noche en Tikrit, mientras que nueve civiles fallecieron por una bomba colocada en una carretera durante la hora punta en una zona de mayoría chií cerca de Bagdad.
El Ejército estadounidense informó hoy de la muerte de uno de sus efectivos por las herids que ayer recibió durante un enfrentamiento librado en el este de Bagdad y en el que resultaron heridos otros dos soldados de su contingente.
