BAGDAD, 15 Oct. (EP/AP) -
El ex dictador iraquí Sadam Huseín y otros siete altos cargos de su régimen por la masacre de chiíes cometida en los años ochenta podrían ser sentenciados en tres semanas, según informó el principal fiscal del juicio, Jaafar al Moussawi.
La Fiscalía ha pedido la condena a muerte y ésta le será aplicada si finalmente es declarado culpable. En cualquier caso, la sentencia puede ser apelada ante un tribunal superior. También están imputados en este juicio el ex vicepresidente iraquí, Taha Yassin Ramadan y el ex jefe de la inteligencia del régimen, Barzan Ibrahim.
El proceso comenzó hace ya un año, cuando los ocho acusados conocieron los cargos por los que se les imputa el asesinato de 148 chiíes de la localidad de Dujail, masacre cometida después de que fracasara un intento de asesinato contra el presidente iraquí, que tuvo lugar en 1982.
La primera fase del juicio terminó el 27 de julio y desde entonces los cinco jueces del tribunal estudian el veredicto. En un principio la fecha anunciada para la sentencia era la de mañana lunes.
"No habrá audiencia mañana", afirmó al-Moussawi. "En su lugar habrá una declaración del tribunal que fijará la fecha para la audiencia en la que se pronunciarán las sentencias". Cuando se le pidió que ofreciese una fecha precisa, el fiscal dijo: "En no más de tres semanas".
Sadam es el principal acusado en otro juicio, en el que se enfrenta al cargo de genocidio por su relación con una operación gubernamental contra de los kurdos del norte del país. La fiscalía sostiene que unas 180.000 personas murieron en esa campaña.
