TEHERÁN, 15 Feb. (EUROPA PRESS) -
El atentado perpetrado ayer contra un autobús en el que viajaban efectivos de la Guardia Revolucionaria iraní en Zahedán fue perpetrado por el grupo terrorista Yondollah, presuntamente vinculado a Al Qaeda, según reconoció hoy el comandante en jefe de la Base de Operaciones de Seguridad de la Provincia de Sistán Baluchistán, el general Mohammad Ghaffari, en el que perdieron la vida 11 personas, mientras otras 31 resultaron heridas, según un nuevo balance policial.
"Una de las bandas relacionadas a los Yondollah, que entró por la frontera para perpetrar sabotajes y acciones inhumanas como la de atentar contra los agentes de Seguridad y colocar bombas, fue disuelta ayer", incidió el general, gracias, destacó a "las confesiones de los detenidos y al inicio de una acción (policial) rápida", explicó Ghaffari a la agencia estatal IRNA.
En este sentido, explicó que "la pasada noche fue detenido otro miembro de la banda en un enfrentamiento armado con los agentes y al cual se le incautó armas y municiones", por lo que el número de arrestos practicados en relación con el atentado de Zahedán ascendieron a "tres presuntos autores principales y se han detenido a 65 sospechosos", explicó.
Entre los detenidos, explicó, el cometido de dos de ellos "consistía en cubrir y facilitar la huida a los autores principales del atentado", pero éstos, subrayó "empezaron a disparar contra la gente y a grabar lo ocurrido", poco antes de ser arrestados. Asimismo, subrayó que "la cinta incautada a los detenidos" demuestra "tajantemente" su relación "con diversas bandas opositoras del sistema y con los organismos de espionaje de algunos países como Estados Unidos y Reino Unido".
"A estos individuos se les requisó una cámara de grabación en la que estaban grabadas todas las escenas desde el comienzo de la operación, la forma en la que colocaron los explosivos, la salida del piso franco, el ataque al autobús de los funcionarios de los Guardianes de la Revolución...", explicó.
Por otra parte, el general señaló que esta mañana "efectivos de la base mixta de Zahedán han detectado un piso franco perteneciente a los miembros principales de la banda de Jondollah y han procedido a su registro", en cuyo interior, subrayó, "se han encontrado 7 kalashnikovs, un lanzagranadas con sus respectivas municiones, 80 libras (36 kilogramos) de TNT, lista para usar en diferentes puntos de Zahedán, 16 granadas de mano y varios sables".
No obstante, puntualizó que "los miembros de esta banda utilizaban dos pisos alquilados en la ciudad de Zahedán", uno de los cuales alquilaron hace nueve meses, a pesar de que sólo lo utilizaron, por primera vez, la noche anterior al atentado "para colocar 100 libras (45 kilogramos) de explosivos, los cuales pusieron en un automóvil de marca Peykán que hicieron explotar frente al autobús que llevaba a los funcionarios de los Guardianes de las Revolución", explicó.
