Irán.- Bush asegura que no dudará en usar "el poder militar" contra Irán si es necesario para defender a Israel

Actualizado: lunes, 20 marzo 2006 22:28

El presidente se mantiene optimista respecto a la situación en Irak y pide a los críticos que observen las "evidencias de progreso"

CLEVELAND, 20 Mar. (EP/AP) -

El presidente de Estados Unidos, George W. Bush, aseguró hoy que no dudará en usar "el poder militar" contra Irán si es necesario para defender a Israel, aunque matizó que espera que el conflicto desencadenado por el programa nuclear de Teherán se resuelva por la vía diplomática.

Bush insistió en que dicho programa iraní está destinado a la fabricación de armas nucleares, lo que consideró que es "inaceptable" y calificó al presidente de la República islámica, Mahmud Ahmadinejad, de "seria amenaza".

El presidente norteamericano realizó estas afirmaciones en el marco de un discurso en el que reiteró su confianza en la estrategia seguida en Irak, tratando así de reestablecer el apoyo a la campaña iniciada hace tres años en la nación y pidió que se obvien las escenas de violentas y se observen "los claros signos de progreso" realizados por el país.

Bush justificó durante su discurso la última campaña llevada a cabo en la ciudad norteña iraquí de Tal Afar, cuyo objetivo era "eliminar a terroristas que atacaban a civiles". Calificó el operativo de "éxito".

EL optimismo continuó reinando en las palabras del presidente quién vislumbró un futuro "Irak libre" y resaltó "evidencias de progreso", pese a lo que criticó que "es más fácil dar información de asesinatos" que de progresos. "Algunos ven la violencia cada noche en sus televisiones y se preguntan cómo puedo permanecer tan optimista acerca de las posibilidades de éxito en Irak. Ellos se preguntan qué es lo que veo que ellos no ven", afirmó.

"PAIS CREADO POR INMIGRANTES"

Cambiando de tema, el mandatario norteamericano quiso recordar que Estados Unidos es un país creado por inmigrantes, por lo que éstos deben ser tratados con justicia, pero reiteró que se opone a que se apele a la amnistía para resolver el problema de los millones de indocumentados.

"Somos una tierra de inmigrantes", aseguró en la semana que precede al inicio de las sesiones para reformar de las leyes de inmigración, pese a lo que se mostró contrario a conceder la amnistía a los indocumentados, porque esto significaría "tener otros 11 millones de indocumentados" inmediatamente después, generando nuevamente un estado de crisis.

"Tenemos un sistema legal que es respetuoso de las personas", matizó. Bush propuso hace dos años un programa de trabajo temporal para inmigrantes que permitiría acudir a Estados Unidos a extranjeros a realizar trabajos no deseados por los estadounidenses durante dos años, tras lo cual deben regresar a sus países para renovar el permiso. Sin embargo, este programa no supone en ningún caso el caminos hacia la obtención de la residencia.