DUBAI, 14 May. (Reuters/EP) -
Irán planea suavizar la censura en Internet al introducir "filtros inteligentes" que solo controlarán las páginas que el Gobierno islámico considere inmorales, según ha confirmado este miércoles el ministro de Comunicación, Mahmud Vaezi.
El uso de Internet en Irán es elevado, en parte porque muchos jóvenes encuentran aquí una alternativa a la prohibición oficial de los productos culturales. Teherán, en ocasiones, también controla las redes sociales como Twitter y Facebook.
La censura se ha aligerado algo desde que Hasán Rohani fue elegido el año pasado y gracias a la progresiva introducción de "filtros inteligentes".
"Hemos firmado acuerdos con tres universidades e institutos de investigación para desarrollar un filtro inteligente que bloquee solo las páginas depravadas e inmorales, pero permitiremos el acceso a otras páginas", ha asegurado Vaezi, que no ha nombrado a las organizaciones involucradas en el acuerdo.
"El filtrado inteligente se emplea solo para objetivos específicos y actualmente el proyecto está bajo experimento", según ha recogido la agencia de noticias Mehr.
El ministro todavía no ha aclarado qué se podrá considerar depravado o inmoral. No obstante, los clérigos iraníes utilizan con frecuencia estos términos para referirse tanto imágenes de mujeres con vestimenta occidental como a pornografía.
Irán ha negado los últimos rumores que apuntaban a una posible filtración de aplicaciones como Whatsapp. "Lo que se ha dicho sobre esto es principalmente propaganda sin sentido", ha puntualizado Vaezi. La noticia de Mehr no ha hecho alusión a la última moda de Internet, una página de Facebook en la que las mujeres publican imágenes suyas sin pañuelo.
Al igual que la llegada de la televisión satélite y de los vídeos musicales hace décadas, el ciberespacio también ha supuesto un fenómeno controvertido en la República Islámica, y ha despertado tanto preocupaciones políticas como morales. Desde la oposición clerical conservadora han pedido más supervisión en Internet.
Los ataques contra la libertad de expresión alcanzaron su punto más alto durante la represión de las protestas masivas contra el presidente Mahmud Ahmadineyad tras su reelección en 2009. Varios blogueros fueron encarcelados y al menos una persona fue condenada a muerte por dirigir lo que las autoridades consideraban una web "promiscua". Hace dos años, el líder supremo de Irán, el ayatolá Alí Jameini, instauró un consejo supervisor para monitorizar el acceso a Internet.
