JERUSALÉN, 26 Ago. (Reuters/EP) -
Las autoridades israelíes han anunciado que reducirán a la mitad el combustible que suministran a la única central energética de la Franja de Gaza como represalia a los lanzamientos de cohetes perpetrados el domingo desde el territorio costero, controlado por el partido-milicia Hamás.
Tres cohetes impactaron en el sur de Israel y otros dos fueron interceptados por el escudo Cúpula de Hierro. Tras esta cadena de ataques, las fuerzas israelíes bombardearon un supuesto complejo militar de Hamás, sin que aparentemente se produjesen daños personales a uno y otro lado de la frontera.
La unidad del Ministerio de Defensa de Israel que gestiona asuntos civiles relacionados con Gaza y Cisjordania (COGAT) ha afirmado que "el recorte de la cantidad de combustible a la mitad reducirá significativamente" el nivel de producción de la planta gazací.
COGAT ha advertido de que esta medida, que ha vinculado "al lanzamiento de cohetes" y a "la continua violación de la estabilidad y la seguridad" en la zona, estará en vigor hasta nuevo aviso.
Un portavoz de la compañía eléctrica gazací, Mohamad Thabet, ha lamentado esta medida, toda vez que lo considera un castigo colectivo contra dos millones de personas. "Ya estamos en una crisis y ahora la decisión israelí hará que empeore", ha dicho, ante el temor de que la medida tenga "un grave impacto" en servicios básicos como hospitales.
La población gazací ya sufría ahora doce horas de apagón por cada seis horas de suministro. Thabet prevé que los nuevos recortes reduzcan los periodos de electricidad a plazos de solo cuatro ahora.
