ROMA, 8 Abr. (de la corresponsal de EUROPA PRESS C. Giles) -
Silvio Berlusconi, nacido el 29 de septiembre del 1936, en Milán, con su famosa frase "salgo al campo" pronunciada en el 1994 anunció que pasaba del mundo de la televisión y del espectáculo al mundo de la política con la creación del partido "Forza Italia" para construir un "sueño italiano".
Los detractores de Berlusconi consideran que el sueño que prometía se ha convertido en una pesadilla pero todos reconocen que la "salida al campo" del "Cavaliere" --título honorífico concedido por su actividad empresarial-- cambió la política italiana.
Hasta el 1994, Silvio Berlusconi, licenciado en Derecho, era conocido por su actividad de constructor y de creador de un imperio televisivo. Desde el 1969 al 1979 se ocupa de la construcción de "Milano 2", una ciudad dormitorio a las puertas de la capital de la Lombardía y después siguió la construcción de "Milano 3".
En los años 80, comienza a forjar su imperio televisivo transformado la televisión vía cable Milano 2 en una televisión nacional y así nace Canale 5, el primer canal televisivo nacional alternativo al estatal RAI y la empresa de Publicidad Publitalia. El éxito obtenido con el Canale 5 le empuja a anexionar a su holding Fininvest --fundado en el 1978-- los canales Italia Uno y Retequattro.
Pero antes de convertirse en un magnate de la televisión, a Berlusconi le gusta recordar que ha sido un hombre que "se ha hecho a si mismo", pasando en su juventud de vendedor de aspiradores a tocar el piano y cantar a bordo de cruceros. Todo para ahorrar dinero, poder seguir estudiando y abrir en el 1961 su primera empresa, Edilnord, con un préstamo obtenido del banco donde trabajaba su padre.
Berlusconi continúa ampliando los sectores de los que se ocupa y comienza a comprarse otros medios de comunicación como el diario "Il Giornale", los semanarios Sorrisi e Canzoni TV, hasta que en 1989, comienza la llamada "Guerra de Segrate" por el control del grupo editorial Mondadori --un caso que después le llevaría a los tribunales bajo la acusación de corrupción de jueces--.
La casa editorial se divide y el semanario Panorama pasa a Berlusconi y el resto de periódicos y el semanario L'Espresso fue al empresario Carlo De Benedetti.
Además, Berlusconi es propietario de la productora de cine Medusa y en 1986 se compró el equipo de fútbol del Milán, dando lugar al llamado "periodo de oro" del club milanés. Después, en los años 90, el grupo Fininvest se comenzó a ocupar del sector de los seguros y de la venta de productos financieros con las sociedades Mediolanum y Programma Italia. Fininvest se convierte en el segundo grupo privado italiano con más de 40.000 clientes.
En enero de 1994, Berlusconi anuncia su entrada en política y funda Forza Italia, que de la nada pasa a tener el 20% de los votos de los electores italianos y gana las elecciones, formando una coalición con Alleanza Nazionale de Gianfranco Fini, la Lega Nord de Umberto Bossi y el Ccd de Pierferdinando Casini y Clemente Mastella.
El primer Gobierno de Berlusconi no nace con buen pie, desde los fracasos para la reforma de las pensiones, las manifestaciones de los sindicatos, a los avisos de tener que ir a juicio por corrupción y a la gota que colmó el vaso, cuando en diciembre, siete meses después de las elecciones, Bossi le retiró la confianza e hizo caer el Gobierno.
En el 1996, Forza Italia se presenta a las elecciones sin el apoyo de la Liga Norte y las elecciones las ganó el centro-izquierda de Romano Prodi. Con las rencillas entre los viejos socios completamente superadas en 2001, Berlusconi se presenta apoyado con una fuerte coalición "La Casa de la Libertad" y gana con una amplia mayoría, que le permitiría convertir esta legislatura en la más larga de la historia de la República italiana.
Han sido cinco años donde Berlusconi ha pasado de un aula a otra en los tribunales para responder a las acusaciones de corrupción de jueces, falsificación de balances y contactos con la mafia y de los que ha salido absuelto o los casos han prescrito. Mientras que algunos de sus colaboradores más cercanos, como Cesare Previti, han sido condenados por corrupción de la justicia.
En lo personal, Berlusconi se declara amante de la música y el fútbol. En el 2003 grabó un disco junto al napolitano Mariano Apicella, un trabajo lleno de canciones románticas. Durante esta legislatura pasó por el quirófano para mejorar su imagen al realizarse un 'lifting' y un trasplante de pelo. Berlusconi tiene cinco hijos, fruto de dos matrimonios distintos. Marina y Piersilvio, hijos del primero de ellos, participan en sus negocios y otros tres que tuvo con su segunda esposa, la actriz Verónica Lario.
