ROMA, 23 Abr. (De la corresponsal de EUROPA PRESS, G. Moreno) -
El primer ministro italiano, Romano Prodi, aseguró hoy que el nacimiento del nuevo Partido Democrático (en el que se fusionarán los partidos Demócratas de Izquierda y La Margarita, que son los principales partidos de la coalición de centro-izquierda) no acarreará consecuencias negativas para su Ejecutivo.
"Llevo 12 años deseando el Partido Democrático", aseguró el premier, "así que no creo que su llegada pueda dañar al Gobierno", añadió en respuesta a las preguntas de los periodistas en Bolonia.
Las dos principales formaciones del centro-derecha italiano corroboraron este fin de semana su voluntad de fusionarse en un único partido, que se convertiría en la primera fuerza política del país, por delante de Forza Italia, teniendo en cuenta los resultados de las últimas elecciones de 2006.
Ambos partidos, que este fin de semana celebraron su respectivo congreso nacional, acordaron la convocatoria de la asamblea constituyente del nuevo partido en octubre. Según las previsiones, el Partido Democrático nacería oficialmente en 2008.
No obstante, esta fusión no ha sido fácil, sobre todo como consecuencia de las diferencias ideológicas que revisten determinadas facciones de ambos partidos. De hecho, una parte de los Demócratas de Izquierda anunció su rechazo a unirse a los católicos de izquierda --situados en el bando de La Margarita-- en un único partido.
Otro de los interrogantes que sigue abierto es el del líder de la nueva formación, sobre todo después de que Prodi confirmara en una carta abierta al diario 'La Repubblica' su intención de no volverse a presentar a las elecciones de 2011.
