ROMA, 18 Abr. (de la corresponsal de EUROPA PRESS, G. Moreno) -
El Tribunal Constitucional italiano declaró hoy admisibles los dos recursos presentados por el Gobierno que dirige el primer ministro Romano Prodi contra la Fiscalía de Milán por su actuación en el caso del secuestro del supuesto terrorista Abu Omar, después de que la Fiscalía pidiera el reenvío a juicio de 35 personas, entre ellas, el ex director de los servicios secretos de Italia, Nicolò Pollari.
El Gobierno acusa a la magistratura de haber violado el secreto de Estado al menos en tres supuestos, mediante la adquisición de un documento reservado que se hallaba en las oficinas de los servicios secretos italianos en Roma, desvelando la identidad de numerosos agentes secretos y ejerciendo "presiones" sobre los indagados para que revelaran determinadas informaciones.
Además de acusar a la magistratura de haber violado el secreto de Estado --que fue decretado en su día por el anterior primer ministro Silvio Berlusconi--, el Gobierno reclama la anulación del reenvío a juicio de los acusados, entre los que figuran 26 estadounidenses, casi todos ellos, pertenecientes a la CIA.
El propósito de este recurso es invalidar la decisión tomada por la juez de Milán, Caterina Interlandi, el pasado 16 de febrero, y por la que reenvió a juicio a 35 personas --entre ciudadanos italianos y americanos-- por su supuesta colaboración en el secuestro del imán Osama Moustafa Hassan Nasr --también conocido como Abu Omar--.
La Fiscalía milanesa llevaba tiempo insistiendo en que el Gobierno italiano debería reclamar la extradición de los 26 ciudadanos americanos que podrían haber estado involucrados en el secuestro del imán.
El anterior Gobierno de Silvio Berlusconi rechazó esta propuesta, mientras que el actual Ejecutivo que dirige Romano Prodi ya ha señalado que no presionará a Washington al respecto.
Según los fiscales milaneses, un equipo dirigido por la CIA capturó al presunto terrorista Abu Omar en Milán en febrero de 2003, desde donde fue trasladado a varias bases aéreas en Italia y Alemania para finalmente llevarlo a Egipto, donde fue torturado física y psicológicamente, según declara su abogado.
